Quisiera darle mi opinión referente a lo siguiente: ¿Qué ganamos los chilenos, o qué beneficios tenemos nosotros como ciudadanos chilenos de parte del Estado de Chile? Si pensamos que nuestros gloriosos soldados de la guerra de 1879, aquellos que dieron su vida por este país, nos entregaron un país hasta Arica por el norte, que lucharon a muerte por este territorio, ¿para qué?
Para que hoy ningún chileno tenga gratuidad para un terreno donde vivir. Como así también, y a pesar de que la Constitución Política de Chile asegura y garantiza educación y salud para todos los chilenos, hoy vemos con tristeza que esto no es así.
Una salud totalmente mala, pésima. Una educación estatal pésima. Casi no podemos disfrutar de nuestras playas. No se puede acampar. Hay que pagar estacionamiento en muchas playas, y cobran un ojo de la cara. Se cobra peaje en las carreteras. Se tiene que pagar para circular en vehículo por las ciudades, etc., etc.,
Éste es el resultado a lo que nos han llevado los precarios parlamentarios que ha tenido este país, hace muchos años. Los mismos años que Chile estuvo en silencio, yo diría de los 60 para adelante.
Y los resultados están a la vista. Hicieron lo que quisieron con el pueblo, si hasta los remedios son los más caros de Sudamérica. El agua está en poder los privados. Somos como monigotes de las 7 familias dueñas de Chile, porque debe saber la ciudadanía que ni el mar es de los chilenos, si no que es de unos pocos.
Chile es una pena de país. Y sus hijos están más preocupados del consumismo, de pasarlo bien, de comprarse un 4x4, menos de cómo está el país. Ese mismo país que le entregarán a sus nietos...pero no se inmutan.
Y miren ahora, medio Chile quemándose. Honestamente, la mayoría de estos incendios manipulados por manos criminales. No hay duda de aquello.
Ah, pero una buena noticia. Los parlamentarios aprobaron aumentar la cantidad de diputados y senadores, y además como es sabido, se aumentaron los sueldos.
Hace unas semanas lo hicieron en esta fecha para pasar "piolita", por las vacaciones de muchos, las fiestas de fin de año, o sea, caraduras desde principios de año.
Gracias señor director.
Juan Bennett