Intentó matar a su esposa cegado por los celos: culpable
En plenas Fiestas Patrias, una supuesta infidelidad lo hizo preso de los celos al punto de intentar matar a la mujer que es su esposa hace 17 años y madre de sus tres hijos.
Hoy, ese brutal actuar le valió a Osvaldo Segundo Aguilera Ramos ser condenado como autor del delito tentado de femicidio, por el cual se le aplicó una pena de 5 años de presidio menor en su grado máximo y, como medida accesoria, el abandono del lugar común por el término de un año.
Sin embargo, debido a que reunía los requisitos dispuestos por la ley, se le sustituyó al trabajador el cumplimiento de la pena privativa de libertad por la de libertad vigilada intensiva durante cinco años.
CONDENA
Según la acusación presentada por el fiscal adjunto Javier Loyola Reyes ante el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Antofagasta, Aguilera Ramos, de 42 años, protagonizó los hechos el 17 de septiembre del año pasado, luego de una fiesta en la que ambos compartieron.
Una vez culminado el festejo, la víctima F.R.C.M. (39) se sentó en el furgón del acusado, percatándose que mantenía en su interior un rollo de alambre. Intrigada, le preguntó a su esposo para qué llevaba ese material, respondiéndole éste que era para matarla por una supuesta infidelidad.
Acto seguido, el hombre detuvo el vehículo y le ató las manos a su mujer con cinta adhesiva, poniéndole el alambre en el cuello y comenzó a asfixiarla. La mujer logró poner dos dedos en su cuello y aminorar así la fricción del alambre, suplicándole a su esposo que no siguiera; que pensara en sus tres hijos.
En esos instantes el hombre dejó de asfixiarla y le desató las manos, resultando la víctima con equimosis en el cuello y tumefacción en el dedo medio y anular izquierdo, de carácter leve.
En el juicio el imputado reconoció que habían tenido unas diferencias y habían peleado y que efectivamente el estaba celoso, ya que su mujer estaba recibiendo mensajes en su celular de un desconocido.
Ante el tribunal declararon testigos y peritos, particularmente del Servicio Nacional de la Mujer (Sernam), que indicaron que a los pocos días de efectuada la denuncia, la víctima comenzó a mostrar signos de retractación.
La mujer narró a la especialista del servicio que había ido a ver a su marido a la cárcel y que tenía sentimientos de culpa, dado que sus hijos le pidieron que no mantuviera a su padre en la cárcel.
SERNAM
El director regional (s) y abogado del Sernam, Carlos Riveros, afirmó que una vez conocido el hecho se tomó contacto con la afectada, quien aceptó asesoría legal y reparatoria en el Centro de la Mujer de Antofagasta y, junto a ello, interponer una querella por femicidio frustrado con patrocinio del Sernam el 2 de octubre, desistiendo posteriormente la víctima de la querella. "Para estos casos no existe la impunidad, más aún cuando la afectada haya desistido de la denuncia", indicó. J
Redacción