Mario Anziani Ribera
Jorge Cajigal Vargas, fisiólogo del ejercicio, afirma que "Calama está bendecido", porque "está a la altura óptima… tiene la altura ideal para conseguir las mejores adaptaciones y además se puede trabajar en cerros o yendo por los alrededores".
El fisiólogo que viajó exclusivamente a Calama este fin de semana para controlar a los tres atletas nacionales que entrenan hace un mes en El Loa, - entre ellos, Carlos Díaz del Río, que se prepara para su participación en las Olimpíadas de Río 2016-, sostiene que la instalación de un Centro de Alto Rendimiento (CAR) en la capital de El Loa, "será una decisión inteligente, porque hoy en día el mundo tiene los ojos puestos en Chile".
"He participado en congresos internacionales de altura, con gente de todo el planeta y los europeos postulan que en período de invierno, los meses más fríos, les encantaría venir el hemisferio sur, conocer San Pedro de Atacama y Calama que podría tener todas las comodidades, pista atlética, instalaciones para chequeos y evaluaciones".
Cajigal, postula que un CAR atraería también a deportistas de alto rendimiento, "atletas máster, personas sobre treinta años, que son tan fanáticos como un atleta de veinte 20 y que tienen los ingresos para financiar una estadía en altura".
Jorge Cajigal, llegó a Calama premunido de "lo último que tenemos en medición de oxígeno". Un equipo portátil telemétrico, que no pesa más de un kilo y una vez adosado al cuerpo del atleta, mide más de 80 parámetros cada vez que el deportista exhala.
"Lo que medimos, principalmente, es el consumo máximo de oxígeno. Es un trabajo que se coordina con la entrenadora Julia del Río para potenciar virtudes y atacar defectos. No es un trabajo a ciegas. La idea es que mientras ellos permanezcan en la altura modifiquen su plan de entrenamiento", dice respecto a los medallistas nacionales, Carlos Díaz (en preparación para Río 2016); Roberto Tello (Juegos Iberoamericanos 2016) y Juan Medina (3º en 10 mil metros, Bogotá 2015).
En el proceso de mediciones también se chequeó al atleta calameño, David Balderas. "Me impresionó la marca que él tiene, pese a que las condiciones en que entrena no son las más apropiadas. Es un aprendizaje interesante comparar a un deportista, nacido y criado en Calama con las visitas".
Cajigal, lideró el estudio que se hizo en La Paz, donde se llegó a la conclusión que sí se puede realizar deportes en altura".
Un lugar bendito
Jorge Cajigal explica que la cantidad de oxígeno disponible en todo el planeta, es la misma: 21 por ciento, aproximado. "Ese porcentaje es invariable, pero lo que si varía de un lugar a otro es la presión y eso es lo que impacta a nuestro cuerpo.
Al paso de quince días la persona recupera su nivel, de modo que cuando vuelve a nivel de mar, se espera un rendimiento mayor. "Es una especie de doping natural que no tiene peligro para la salud si se hace bien", indicó.