Foto denuncia: Basural que sigue creciendo
En el sector aledaño al campamento indígena Lickantatay de Calama se encuentra este basural, que es alimentado a diario por inconscientes que van a dejar allí sus residuos.
En el sector aledaño al campamento indígena Lickantatay de Calama se encuentra este basural, que es alimentado a diario por inconscientes que van a dejar allí sus residuos.
Pese a que muchas personas limpian en este lugar, el terreno baldío ubicado al lado del sector del Portal del Inca de Calama, también es utilizado para dejar basura.
Un verdadero caos vehicular se vivió en Calama tras la entrada de los alumnos de los establecimientos municipales de la capital minera.
Esto, a raíz que la mayoría de los papitos pretende dejar siempre a sus hijos en sus vehículos particulares en el primer día de clases y esto se agrava más cuando gran parte de la Avenida Balmaceda está cortada, y hay que hacer malabares para saber dónde pasar para llegar al destino.
Espero con el correr de los días se mejore el tránsito vehicular en la capital minera, aunque falta más la presencia policial para controlar a las máquinas que circulan por la ciudad.
Efraín López
Por su medio me enteré que quieren dejar algunas calles del centro de la capital minera como vías exclusivas para la locomoción colectiva, lo cual me parece que no es lo mejor y que prefiero mejor una restricción vehicular, debido al gran parque automotriz que existe en la capital minera.
Esto, porque somos muchas las personas que circulamos por el centro para acudir a nuestro trabajo o el seremi de Transportes quiere que pasemos "volando" por el casco central.
Mario Torrejón
Por lo que hemos visto jugar a Cobreloa, nos damos cuenta que tenemos un entrenador que anda perdido, porque sería un milagro ganar la liguilla, jugar una definición extra con Everton y ganarla, para así volver a la División de Honor.
Aunque César Vigevani cumpla esta proeza, debemos cambiarlo, porque tiene un desorden táctico, que ni él se lo entiende.
Con jugadores que no juegan en los puestos que los coloca, con decisiones tontas en los cambios, que rayan en lo amateur.
Por ello, a Vigevani no hay que renovarle contrato.
Wilson Caamaño