Cartas
Hasta desaparecerMazorca de Oro al amigo escritor
Señor director:
En esta oportunidad, como representante de la Sociedad de Escritores de Chile, SECH filial Antofagasta y escritora chuquicamatina, quisiera felicitar a nuestro querido amigo escritor de varios libros don Alejandro Álvarez Vargas, músico, creador de varios himnos como el de Cobreloa. Nos alegramos que este año le fuera otorgado el premio de la Mazorca de Oro en Calama.
Quisiera destacarlo por la generosidad en entregar lo que sabe a todos los que lo visitan en su librería, alumnos, turistas, visitantes, aprendices de escritor, historiadores, etc.
Es realmente una odisea de paciencia la que tiene con los principiantes cuando le van a preguntar detalles de la historia que vivió en el mineral y en Calama del ayer. Siempre recuerdo cuando yo quería escribir él me contaba la subida y escape de los toros en el camino desde Calama al camal o cuando él siendo escolar de la escuela 3, iban junto a sus compañeros a mirar a través de las vitrinas de la droguería al dueño, que había hecho pacto con el diablo. Farmacia ubicada al lado de la Librería Chilex.
Mis padres fueron sus amigos, y don Alejandro siempre tiene la gentileza de enviarnos un ejemplar dedicado, de sus nuevos libros.
Yo lo conozco desde pequeña, cuando escuchaba al conjunto musical de Jonny Álvarez todos los domingos en la Terraza. Nos vimos recibiendo la medalla de los 100 años de Codelco por escribir sobre Chuquicamata.
También quiero darle las gracias por exponer y vender en su local los libros de todos sus pares, una feria del libro abierta todo el año con ejemplares de la región, principalmente de Calama y su historia, un don de camaradería con los otros creadores; algo que hoy carecen los que escriben en Calama.
Nancy Monterrey
Señor director:
Lo que está pasando con Cobreloa no nos hace pensar más que existe detrás gente u organismos que lo quieren ver desaparecer. No tiene un mal equipo, hay buenos nombres, sin embargo en cancha no se ve nada de eso. Quizás lo mejor es desaparecer y reaparecer de las cenizas, porque hace años ya se ve que se está nadando contra la corriente y no queda mucho más que hacer, que resignarse a no estar más en el fútbol profesional.
Juan Solís