Redacción - La Estrella del Loa
Quiso ayudar a un vecino y decidió realizar una instalación eléctrica en su vivienda.
Ambos viven en una comunidad en proceso de formalización en el sector de Yalquincha.
Mario Alejandro Colipi Ancamilla de 37 años, no pensó que lo que fue un acto de buena voluntad, podía terminar en una verdadera tragedia.
Los antecedentes preliminares que se manejan sobre la emergencia que se registró la tarde del lunes en el sector poniente de la ciudad, dan cuenta que el hombre recibió una fuerte descarga eléctrica.
Estuvo durante toda la jornada trabajando en la vivienda de su vecino. Durante la tarde comenzó a recorrer la techumbre, todo con objeto de arreglar la precaria instalación eléctrica.
Sus pasos se escuchaban desde el interior de la vivienda, y fue justamente la ausencia de ruidos lo que llamó la atención del propietario, quien salió a observar qué estaba ocurriendo.
Fue en ese momento que se percató que la víctima se encontraba herida y sin presentar signos vitales.
De forma inmediata solicitó el apoyo de personal de Bomberos, Samu y Carabineros. Era urgente que recibiera atención médica.
A pesar de la celeridad con que se desplazaron los equipos de emergencia y cada uno de los esfuerzos realizados para su reanimación, el hombre perdió la vida.
De forma inicial se pudo conocer que cuando quiso cortar algunos cables, manipulaba el lugar solo con una tijera. No contaba con los equipos de seguridad que impidieran este tipo de desenlace.
El hombre deja a una hija de siete meses y a su mujer, quien no daba crédito a lo que había ocurrido con Mario Colipi.
Su cuerpo fue derivado hasta el Servicio Médico Legal, donde fue sometido ayer a la autopsia de rigor, confirmándose efectivamente su deceso por electrocución.
Personal de la Brigada de Investigación Criminal, Bicrim de la PDI se encuentra a cargo de la investigación, que permita descartar intervención de terceras persona en este trágico accidente al interior de una vivienda.
7 meses tiene la hija del, joven albañil que perdió la vida por una electrocución.
40 minutos trabajando, en la reanimación de la víctima arrojó infructosos resultados.