Redacción - La Estrella
A diferencia de sus compañeros extranjeros, que terminado el partido con Puerto Montt corrieron al aeropuerto de Calama para tomar conexiones y llegar a pasar estos tres días de descanso junto a sus familiares, Lucas Simón decidió quedarse en la zona.
"Tengo dos hijos chicos, una de ellas es una nena que tiene unos meses y el otro va al jardín, así es que aprovecharé estos días para aplicar un par de relajantes musculares y dormir hasta muy tarde. Viajar desgasta mucho y ya tendré tiempo para ello", dice entre risas el goleador del ascenso.
-Has tenido una carga de partidos impresionante. ¿Se siente a esta altura del año?
-Mucho. La verdad es que ha sido un año duro porque no tuvimos vacaciones, vinieron partidos de Copa Chile y con equipos grandes de Santiago, lo que suma un componente de más presión, más vitrina. Eso, a pesar de que uno no lo pondera, sin duda que agota y estos días nos van a venir muy bien a todos para desconectarnos un poco y volver con todo a la parte final del año que va a ser terrible, muy intensa para todos los equipos.
-Precisamente, tanto en Valdivia como ante Puerto Montt se notó ese desgaste, porque fueron equipos que los complicaron más de la cuenta...
-Yo creo que más bien, estos dos equipos con los que jugamos los últimos partidos eran muy buenos. Se paraban bien, tienen gente que hace rotar el balón y no la pierden fácil, te obligan a un desgaste. ¿Viste que Puerto Montt se haya desordenado con el primer gol nuestro? Siguió jugando apegado a su libreto. Son equipos trabajados, que juegan bien, más allá de cómo vayan en la tabla.
-Tuviste que moverte muchísimo contra ellos para encontrar tu espacio y tener alguna opción de gol...
-Es que me pusieron a tres marcando en el área y era casi imposible tener espacio porque uno de ellos -Jorge Aquino- me seguía para todos lados. Igual, a Pablito -Parra- le grité dos veces porque le pedía que fuera él a buscar el centro cuando yo arrastraba la marca del central que cabeceaba y la pelota caía atrás. Y finalmente en una hizo esa diagonal, me fue a abrazar cuando hizo el gol y me dio las gracias diciéndome "te hice caso, resultó"...
Lucas Simón está disputando dos frentes importantes. El grupal, que es conseguir el ascenso a fines de este año y el individual, donde pelea palmo a palmo con el ariete de Coquimbo Unido, Rodrigo Holgado, por ser el máximo artillero de la competencia.
"Ya lo dije una vez y lo repito ahora. La lucha por ser el goleador del campeonato me da lo mismo. Lo que me importa es conseguir el ascenso, sea directamente o por liguilla. Eso es lo que quiero conseguir con este club y por lo que todos estamos haciendo el esfuerzo", dijo.