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está más safado ahora"

En entrevista exclusiva adelantó lo que será "Prófugos" en la segunda temporada.

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l Andre Pierre Malebrán T.

Una aventura más, o más bien, un puñado más de aventuras; movimientos y escenas de acción, tanto físicas como psicológicas, y una tensión que ahora está garantizada por cada uno de los capítulos. Es la nueva temporada de "Prófugos", el suspenso chileno del monstruo de la TV latinoamericana, HBO, que vuelve a nuestro país para continuar con el éxito que ya logró en el primer ciclo.

Algunos de los parajes utilizados para filmar la mega-producción latina, se ubicaron en nuestra región. San Pedro de Atacama y el aeropuerto de Calama fueron los paisajes donde los actores interpretaron una parte de la trama en la que debían trasladar un cargamento de cocaína de Bolivia a Chile.

En espera del retorno próximo a las pantallas, conversamos con uno de sus protagonistas, Luis Gnecco quien interpreta a Mario Moreno, en su visita a La Perla del Norte la semana pasada.

En esta oportunidad el guión es trabajado por Pablo Larraín además que Pablo Illanes, lo que según las palabras de Gnecco, le otorga un ritmo más intenso y duro. "Está todo mucho más desatados, más violento, es una serie mucho más atrevida", explica, agregando que en esta oportunidad, desde el primer capítulo el público quedará impactado.

-En el final de la primera temporada los protagonistas quedan en la cárcel (el ex centro penitenciario de Buin que está abandonado desde el terremoto del 2010), así que ahora comienza de ahí. Es todo muy rudo. Peleas, violaciones, cuchillazos, es además en una locación real. Causa mucho impacto.

-Ahora las escenas de acción son controladas, con seguridad, pero somos los actores los que estamos ahí. No hay dobles. Entonces los peligros son reales, las caras de susto son de verdad y las tensiones son reales. Eso causó mucho impacto afuera (del país).

-Claro, imagínate que todo lo que fue la serie, como un "arco" con acción en el principio, después una tensión más psicológica y hacia el final había de nuevo como una cuestión más tensional; bueno, entonces todo ese "arco" ahora está puesto en un sólo capítulo. Cada episodio tiene acción, tensión, intriga y violencia. Todo está mucho más dosificado.

-Yo me separo de los demás, así terminó la primera serie. Ahora los comienzo a perseguir y se subraya eso. Me da una misión un personaje que ya venía de la primera temporada, y finalmente tengo que perseguirlos y de alguna manera son personajes que no quieren estar juntos pero que sí terminan estando juntos, odiándose y con todas las desavenencias que se pueden tener.

-Nos preguntaron (en la producción extranjera) qué visión había del poder, si era una cosa corrupta o no (...) nosotros le decíamos que la cosa no iba por la corrupción, sino que se presenta un gobierno torpe, que no sabe lidiar con los problemas de la realidad, que se le escapan las cosas de las manos, que es caótico. Entonces aparece el narcotráfico y la corrupción, pero no es una serie de narcotráfico y corrupción (...) en fin. Aparecen muchas más líneas argumentales que vienen a complementar un rompecabezas. No es una serie de un sólo tema. Es una serie que mezcla muy bien la ficción con la realidad. J

está más safado ahora"

En entrevista exclusiva adelantó lo que será "Prófugos" en la segunda temporada.

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l Andre Pierre Malebrán T.

Una aventura más, o más bien, un puñado más de aventuras; movimientos y escenas de acción, tanto físicas como psicológicas, y una tensión que ahora está garantizada por cada uno de los capítulos. Es la nueva temporada de "Prófugos", el suspenso chileno del monstruo de la TV latinoamericana, HBO, que vuelve a nuestro país para continuar con el éxito que ya logró en el primer ciclo.

Algunos de los parajes utilizados para filmar la mega-producción latina, se ubicaron en nuestra región. San Pedro de Atacama y el aeropuerto de Calama fueron los paisajes donde los actores interpretaron una parte de la trama en la que debían trasladar un cargamento de cocaína de Bolivia a Chile.

En espera del retorno próximo a las pantallas, conversamos con uno de sus protagonistas, Luis Gnecco quien interpreta a Mario Moreno, en su visita a La Perla del Norte la semana pasada.

En esta oportunidad el guión es trabajado por Pablo Larraín además que Pablo Illanes, lo que según las palabras de Gnecco, le otorga un ritmo más intenso y duro. "Está todo mucho más desatados, más violento, es una serie mucho más atrevida", explica, agregando que en esta oportunidad, desde el primer capítulo el público quedará impactado.

-En el final de la primera temporada los protagonistas quedan en la cárcel (el ex centro penitenciario de Buin que está abandonado desde el terremoto del 2010), así que ahora comienza de ahí. Es todo muy rudo. Peleas, violaciones, cuchillazos, es además en una locación real. Causa mucho impacto.

-Ahora las escenas de acción son controladas, con seguridad, pero somos los actores los que estamos ahí. No hay dobles. Entonces los peligros son reales, las caras de susto son de verdad y las tensiones son reales. Eso causó mucho impacto afuera (del país).

-Claro, imagínate que todo lo que fue la serie, como un "arco" con acción en el principio, después una tensión más psicológica y hacia el final había de nuevo como una cuestión más tensional; bueno, entonces todo ese "arco" ahora está puesto en un sólo capítulo. Cada episodio tiene acción, tensión, intriga y violencia. Todo está mucho más dosificado.

-Yo me separo de los demás, así terminó la primera serie. Ahora los comienzo a perseguir y se subraya eso. Me da una misión un personaje que ya venía de la primera temporada, y finalmente tengo que perseguirlos y de alguna manera son personajes que no quieren estar juntos pero que sí terminan estando juntos, odiándose y con todas las desavenencias que se pueden tener.

-Nos preguntaron (en la producción extranjera) qué visión había del poder, si era una cosa corrupta o no (...) nosotros le decíamos que la cosa no iba por la corrupción, sino que se presenta un gobierno torpe, que no sabe lidiar con los problemas de la realidad, que se le escapan las cosas de las manos, que es caótico. Entonces aparece el narcotráfico y la corrupción, pero no es una serie de narcotráfico y corrupción (...) en fin. Aparecen muchas más líneas argumentales que vienen a complementar un rompecabezas. No es una serie de un sólo tema. Es una serie que mezcla muy bien la ficción con la realidad. J

está más safado ahora"

En entrevista exclusiva adelantó lo que será "Prófugos" en la segunda temporada.

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l Andre Pierre Malebrán T.

Una aventura más, o más bien, un puñado más de aventuras; movimientos y escenas de acción, tanto físicas como psicológicas, y una tensión que ahora está garantizada por cada uno de los capítulos. Es la nueva temporada de "Prófugos", el suspenso chileno del monstruo de la TV latinoamericana, HBO, que vuelve a nuestro país para continuar con el éxito que ya logró en el primer ciclo.

Algunos de los parajes utilizados para filmar la mega-producción latina, se ubicaron en nuestra región. San Pedro de Atacama y el aeropuerto de Calama fueron los paisajes donde los actores interpretaron una parte de la trama en la que debían trasladar un cargamento de cocaína de Bolivia a Chile.

En espera del retorno próximo a las pantallas, conversamos con uno de sus protagonistas, Luis Gnecco quien interpreta a Mario Moreno, en su visita a La Perla del Norte la semana pasada.

En esta oportunidad el guión es trabajado por Pablo Larraín además que Pablo Illanes, lo que según las palabras de Gnecco, le otorga un ritmo más intenso y duro. "Está todo mucho más desatados, más violento, es una serie mucho más atrevida", explica, agregando que en esta oportunidad, desde el primer capítulo el público quedará impactado.

-En el final de la primera temporada los protagonistas quedan en la cárcel (el ex centro penitenciario de Buin que está abandonado desde el terremoto del 2010), así que ahora comienza de ahí. Es todo muy rudo. Peleas, violaciones, cuchillazos, es además en una locación real. Causa mucho impacto.

-Ahora las escenas de acción son controladas, con seguridad, pero somos los actores los que estamos ahí. No hay dobles. Entonces los peligros son reales, las caras de susto son de verdad y las tensiones son reales. Eso causó mucho impacto afuera (del país).

-Claro, imagínate que todo lo que fue la serie, como un "arco" con acción en el principio, después una tensión más psicológica y hacia el final había de nuevo como una cuestión más tensional; bueno, entonces todo ese "arco" ahora está puesto en un sólo capítulo. Cada episodio tiene acción, tensión, intriga y violencia. Todo está mucho más dosificado.

-Yo me separo de los demás, así terminó la primera serie. Ahora los comienzo a perseguir y se subraya eso. Me da una misión un personaje que ya venía de la primera temporada, y finalmente tengo que perseguirlos y de alguna manera son personajes que no quieren estar juntos pero que sí terminan estando juntos, odiándose y con todas las desavenencias que se pueden tener.

-Nos preguntaron (en la producción extranjera) qué visión había del poder, si era una cosa corrupta o no (...) nosotros le decíamos que la cosa no iba por la corrupción, sino que se presenta un gobierno torpe, que no sabe lidiar con los problemas de la realidad, que se le escapan las cosas de las manos, que es caótico. Entonces aparece el narcotráfico y la corrupción, pero no es una serie de narcotráfico y corrupción (...) en fin. Aparecen muchas más líneas argumentales que vienen a complementar un rompecabezas. No es una serie de un sólo tema. Es una serie que mezcla muy bien la ficción con la realidad. J