l Una pena de tres años y un día de presidio menor en su grado mínimo dictó el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Antofagasta en contra de Brian Acuña Valenzuela, joven al cual encontró culpable del delito de receptación.

El condenado, de 20 años, deberá también pagar una multa de 5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, cerca de 200 mil pesos. Debido a que no se le concedieron beneficios, cumplirá la pena en forma efectiva.

Los hechos por los que acusó la fiscal Paola Acevedo ocurrieron el 2 de abril del año pasado, cuando Acuña Valenzuela fue sorprendido conduciendo un automóvil, conociendo o no pudiendo menos que conocer el origen ilícito del vehículo, que había sido sustraído. Quien lo descubrió fue un familiar de la víctima y, al verse sorprendido, abandonó la máquina y se dio a la fuga, no si antes amenazarlo con un arma blanca.

En el juicio el imputado reconoció haber manejado la máquina, pero dijo que no lo había robado y que se lo había pasado una persona amiga de la Feria Prat, la que no identificó. Agregó que cuando recibió el auto ya estaba desmantelado y que dormía en el vehículo cuando se acercó un conductor de colectivo, al cual amenazó con una tijera.

Tras analizar la prueba, los sentenciadores dieron por acreditado el delito y la responsabilidad que en él cupo al acusado. J

l Redacción

Su preocupación por un trágico accidente que no es el primero y, están seguros, tampoco será el último, expresaron vecinos de la Avenida Carlos Oviedo Cavada de Antofagasta, a raíz de la fatal colisión registrada el domingo en la esquina con calle Magallanes.

En la emergencia, ocurrida pasadas las 13 horas, perdió la vida María Cristina Julio Romero, de 68 años, quien viajaba como copiloto en el automóvil que guiaba por la segunda vía su esposo, Juan Araya Quiroga (69). La máquina colisionó con un taxibús de la línea 102 que luego volcó y chocó un poste, dejando como consecuencia cinco heridos.

Al unísono, los pobladores calificaron dicha intersección como un peligroso punto que pone en permanente riesgo no sólo su integridad física, sino que también sus bienes materiales, como casas y vehículos. "Nosotros estamos arriesgando; los que vivimos acá estamos intranquilos porque tenemos niños chicos", dijo uno de ellos.

Según los residentes del sector, la esquina en cuestión es una curva peligrosa que "tira" a los conductores hacia el poniente. Peor aún, es pan de cada día para ellos ver cómo los choferes que suben por Magallanes no respetan el doble signo Pare instalado en el lugar, lo que ha provocado un sinnúmero de emergencias de distinta gravedad.

El último- recordaron -lo protagonizó una camioneta que terminó sobre el tensor de un poste. "Quedó en el aire", indicaron los vecinos, para quienes la solución sería regular el tránsito con semáforos. También, dijeron, serían una buena alternativa lomos de toro por ambas arterias.

Ayer la directora (s) de Tránsito de la municipalidad, Daviana Godoy, explicó que se repondrá la señalización presente en esta esquina y se modificará la distancia sobre la cual está instalada el disco Pare del sector para brindar una mejor visibilidad a los conductores. J

l Redacción

Su preocupación por un trágico accidente que no es el primero y, están seguros, tampoco será el último, expresaron vecinos de la Avenida Carlos Oviedo Cavada de Antofagasta, a raíz de la fatal colisión registrada el domingo en la esquina con calle Magallanes.

En la emergencia, ocurrida pasadas las 13 horas, perdió la vida María Cristina Julio Romero, de 68 años, quien viajaba como copiloto en el automóvil que guiaba por la segunda vía su esposo, Juan Araya Quiroga (69). La máquina colisionó con un taxibús de la línea 102 que luego volcó y chocó un poste, dejando como consecuencia cinco heridos.

Al unísono, los pobladores calificaron dicha intersección como un peligroso punto que pone en permanente riesgo no sólo su integridad física, sino que también sus bienes materiales, como casas y vehículos. "Nosotros estamos arriesgando; los que vivimos acá estamos intranquilos porque tenemos niños chicos", dijo uno de ellos.

Según los residentes del sector, la esquina en cuestión es una curva peligrosa que "tira" a los conductores hacia el poniente. Peor aún, es pan de cada día para ellos ver cómo los choferes que suben por Magallanes no respetan el doble signo Pare instalado en el lugar, lo que ha provocado un sinnúmero de emergencias de distinta gravedad.

El último- recordaron -lo protagonizó una camioneta que terminó sobre el tensor de un poste. "Quedó en el aire", indicaron los vecinos, para quienes la solución sería regular el tránsito con semáforos. También, dijeron, serían una buena alternativa lomos de toro por ambas arterias.

Ayer la directora (s) de Tránsito de la municipalidad, Daviana Godoy, explicó que se repondrá la señalización presente en esta esquina y se modificará la distancia sobre la cual está instalada el disco Pare del sector para brindar una mejor visibilidad a los conductores. J

l Con gran pesar fue conocida el domingo la noticia del fallecimiento de Mirtha Elgueda Saavedra, conocida y querida vecina de la población Las Rocas de Antofagasta.

La pobladora dejó de existir a los 68 años a causa de una enfermedad contra la cual su cuerpo no pudo seguir luchando, sin embargo será recordada siempre por su valentía, generosidad con el prójimo y entrega a su familia, ampliamente conocida y apreciada en ese sector de la capital regional.

La recordada pobladora tenía tres hijos: Mirtha Cecilia, Héctor y Joselyn Macarena, quienes están siendo acompañados por familiares y amigos en tan tristes momentos.

Mirtha Elgueda, a quienes especialmente sus sobrinos recuerdan por su eterna alegría, incondicionalidad y estar siempre presta para aconsejar y acompañar cariñosamente a quienes lo necesitaran, fue velada en la capilla de la funeraria "Vida Nueva", ubicada en la intersección de las calles Copiapó y 14 de Febrero.

Más tarde su velatorio se trasladó a la I Iglesia Metodista de Antofagasta- Uribe 865 -, de la que fue una activa y estimada miembro. Hoy, a las 15 horas, tendrá lugar allí un responso luego del cual, a las 16.30 horas, el cortejo partirá rumbo al Cementerio General, donde sus seres queridos le darán el último adiós. J

l Con gran pesar fue conocida el domingo la noticia del fallecimiento de Mirtha Elgueda Saavedra, conocida y querida vecina de la población Las Rocas de Antofagasta.

La pobladora dejó de existir a los 68 años a causa de una enfermedad contra la cual su cuerpo no pudo seguir luchando, sin embargo será recordada siempre por su valentía, generosidad con el prójimo y entrega a su familia, ampliamente conocida y apreciada en ese sector de la capital regional.

La recordada pobladora tenía tres hijos: Mirtha Cecilia, Héctor y Joselyn Macarena, quienes están siendo acompañados por familiares y amigos en tan tristes momentos.

Mirtha Elgueda, a quienes especialmente sus sobrinos recuerdan por su eterna alegría, incondicionalidad y estar siempre presta para aconsejar y acompañar cariñosamente a quienes lo necesitaran, fue velada en la capilla de la funeraria "Vida Nueva", ubicada en la intersección de las calles Copiapó y 14 de Febrero.

Más tarde su velatorio se trasladó a la I Iglesia Metodista de Antofagasta- Uribe 865 -, de la que fue una activa y estimada miembro. Hoy, a las 15 horas, tendrá lugar allí un responso luego del cual, a las 16.30 horas, el cortejo partirá rumbo al Cementerio General, donde sus seres queridos le darán el último adiós. J

l Una pena de tres años y un día de presidio menor en su grado mínimo dictó el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Antofagasta en contra de Brian Acuña Valenzuela, joven al cual encontró culpable del delito de receptación.

El condenado, de 20 años, deberá también pagar una multa de 5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, cerca de 200 mil pesos. Debido a que no se le concedieron beneficios, cumplirá la pena en forma efectiva.

Los hechos por los que acusó la fiscal Paola Acevedo ocurrieron el 2 de abril del año pasado, cuando Acuña Valenzuela fue sorprendido conduciendo un automóvil, conociendo o no pudiendo menos que conocer el origen ilícito del vehículo, que había sido sustraído. Quien lo descubrió fue un familiar de la víctima y, al verse sorprendido, abandonó la máquina y se dio a la fuga, no si antes amenazarlo con un arma blanca.

En el juicio el imputado reconoció haber manejado la máquina, pero dijo que no lo había robado y que se lo había pasado una persona amiga de la Feria Prat, la que no identificó. Agregó que cuando recibió el auto ya estaba desmantelado y que dormía en el vehículo cuando se acercó un conductor de colectivo, al cual amenazó con una tijera.

Tras analizar la prueba, los sentenciadores dieron por acreditado el delito y la responsabilidad que en él cupo al acusado. J

l Una pena de tres años y un día de presidio menor en su grado mínimo dictó el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Antofagasta en contra de Brian Acuña Valenzuela, joven al cual encontró culpable del delito de receptación.

El condenado, de 20 años, deberá también pagar una multa de 5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, cerca de 200 mil pesos. Debido a que no se le concedieron beneficios, cumplirá la pena en forma efectiva.

Los hechos por los que acusó la fiscal Paola Acevedo ocurrieron el 2 de abril del año pasado, cuando Acuña Valenzuela fue sorprendido conduciendo un automóvil, conociendo o no pudiendo menos que conocer el origen ilícito del vehículo, que había sido sustraído. Quien lo descubrió fue un familiar de la víctima y, al verse sorprendido, abandonó la máquina y se dio a la fuga, no si antes amenazarlo con un arma blanca.

En el juicio el imputado reconoció haber manejado la máquina, pero dijo que no lo había robado y que se lo había pasado una persona amiga de la Feria Prat, la que no identificó. Agregó que cuando recibió el auto ya estaba desmantelado y que dormía en el vehículo cuando se acercó un conductor de colectivo, al cual amenazó con una tijera.

Tras analizar la prueba, los sentenciadores dieron por acreditado el delito y la responsabilidad que en él cupo al acusado. J

l Redacción

Su preocupación por un trágico accidente que no es el primero y, están seguros, tampoco será el último, expresaron vecinos de la Avenida Carlos Oviedo Cavada de Antofagasta, a raíz de la fatal colisión registrada el domingo en la esquina con calle Magallanes.

En la emergencia, ocurrida pasadas las 13 horas, perdió la vida María Cristina Julio Romero, de 68 años, quien viajaba como copiloto en el automóvil que guiaba por la segunda vía su esposo, Juan Araya Quiroga (69). La máquina colisionó con un taxibús de la línea 102 que luego volcó y chocó un poste, dejando como consecuencia cinco heridos.

Al unísono, los pobladores calificaron dicha intersección como un peligroso punto que pone en permanente riesgo no sólo su integridad física, sino que también sus bienes materiales, como casas y vehículos. "Nosotros estamos arriesgando; los que vivimos acá estamos intranquilos porque tenemos niños chicos", dijo uno de ellos.

Según los residentes del sector, la esquina en cuestión es una curva peligrosa que "tira" a los conductores hacia el poniente. Peor aún, es pan de cada día para ellos ver cómo los choferes que suben por Magallanes no respetan el doble signo Pare instalado en el lugar, lo que ha provocado un sinnúmero de emergencias de distinta gravedad.

El último- recordaron -lo protagonizó una camioneta que terminó sobre el tensor de un poste. "Quedó en el aire", indicaron los vecinos, para quienes la solución sería regular el tránsito con semáforos. También, dijeron, serían una buena alternativa lomos de toro por ambas arterias.

Ayer la directora (s) de Tránsito de la municipalidad, Daviana Godoy, explicó que se repondrá la señalización presente en esta esquina y se modificará la distancia sobre la cual está instalada el disco Pare del sector para brindar una mejor visibilidad a los conductores. J

l Con gran pesar fue conocida el domingo la noticia del fallecimiento de Mirtha Elgueda Saavedra, conocida y querida vecina de la población Las Rocas de Antofagasta.

La pobladora dejó de existir a los 68 años a causa de una enfermedad contra la cual su cuerpo no pudo seguir luchando, sin embargo será recordada siempre por su valentía, generosidad con el prójimo y entrega a su familia, ampliamente conocida y apreciada en ese sector de la capital regional.

La recordada pobladora tenía tres hijos: Mirtha Cecilia, Héctor y Joselyn Macarena, quienes están siendo acompañados por familiares y amigos en tan tristes momentos.

Mirtha Elgueda, a quienes especialmente sus sobrinos recuerdan por su eterna alegría, incondicionalidad y estar siempre presta para aconsejar y acompañar cariñosamente a quienes lo necesitaran, fue velada en la capilla de la funeraria "Vida Nueva", ubicada en la intersección de las calles Copiapó y 14 de Febrero.

Más tarde su velatorio se trasladó a la I Iglesia Metodista de Antofagasta- Uribe 865 -, de la que fue una activa y estimada miembro. Hoy, a las 15 horas, tendrá lugar allí un responso luego del cual, a las 16.30 horas, el cortejo partirá rumbo al Cementerio General, donde sus seres queridos le darán el último adiós. J

l Una pena de tres años y un día de presidio menor en su grado mínimo dictó el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Antofagasta en contra de Brian Acuña Valenzuela, joven al cual encontró culpable del delito de receptación.

El condenado, de 20 años, deberá también pagar una multa de 5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, cerca de 200 mil pesos. Debido a que no se le concedieron beneficios, cumplirá la pena en forma efectiva.

Los hechos por los que acusó la fiscal Paola Acevedo ocurrieron el 2 de abril del año pasado, cuando Acuña Valenzuela fue sorprendido conduciendo un automóvil, conociendo o no pudiendo menos que conocer el origen ilícito del vehículo, que había sido sustraído. Quien lo descubrió fue un familiar de la víctima y, al verse sorprendido, abandonó la máquina y se dio a la fuga, no si antes amenazarlo con un arma blanca.

En el juicio el imputado reconoció haber manejado la máquina, pero dijo que no lo había robado y que se lo había pasado una persona amiga de la Feria Prat, la que no identificó. Agregó que cuando recibió el auto ya estaba desmantelado y que dormía en el vehículo cuando se acercó un conductor de colectivo, al cual amenazó con una tijera.

Tras analizar la prueba, los sentenciadores dieron por acreditado el delito y la responsabilidad que en él cupo al acusado. J

l Con gran pesar fue conocida el domingo la noticia del fallecimiento de Mirtha Elgueda Saavedra, conocida y querida vecina de la población Las Rocas de Antofagasta.

La pobladora dejó de existir a los 68 años a causa de una enfermedad contra la cual su cuerpo no pudo seguir luchando, sin embargo será recordada siempre por su valentía, generosidad con el prójimo y entrega a su familia, ampliamente conocida y apreciada en ese sector de la capital regional.

La recordada pobladora tenía tres hijos: Mirtha Cecilia, Héctor y Joselyn Macarena, quienes están siendo acompañados por familiares y amigos en tan tristes momentos.

Mirtha Elgueda, a quienes especialmente sus sobrinos recuerdan por su eterna alegría, incondicionalidad y estar siempre presta para aconsejar y acompañar cariñosamente a quienes lo necesitaran, fue velada en la capilla de la funeraria "Vida Nueva", ubicada en la intersección de las calles Copiapó y 14 de Febrero.

Más tarde su velatorio se trasladó a la I Iglesia Metodista de Antofagasta- Uribe 865 -, de la que fue una activa y estimada miembro. Hoy, a las 15 horas, tendrá lugar allí un responso luego del cual, a las 16.30 horas, el cortejo partirá rumbo al Cementerio General, donde sus seres queridos le darán el último adiós. J

l Una pena de tres años y un día de presidio menor en su grado mínimo dictó el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Antofagasta en contra de Brian Acuña Valenzuela, joven al cual encontró culpable del delito de receptación.

El condenado, de 20 años, deberá también pagar una multa de 5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, cerca de 200 mil pesos. Debido a que no se le concedieron beneficios, cumplirá la pena en forma efectiva.

Los hechos por los que acusó la fiscal Paola Acevedo ocurrieron el 2 de abril del año pasado, cuando Acuña Valenzuela fue sorprendido conduciendo un automóvil, conociendo o no pudiendo menos que conocer el origen ilícito del vehículo, que había sido sustraído. Quien lo descubrió fue un familiar de la víctima y, al verse sorprendido, abandonó la máquina y se dio a la fuga, no si antes amenazarlo con un arma blanca.

En el juicio el imputado reconoció haber manejado la máquina, pero dijo que no lo había robado y que se lo había pasado una persona amiga de la Feria Prat, la que no identificó. Agregó que cuando recibió el auto ya estaba desmantelado y que dormía en el vehículo cuando se acercó un conductor de colectivo, al cual amenazó con una tijera.

Tras analizar la prueba, los sentenciadores dieron por acreditado el delito y la responsabilidad que en él cupo al acusado. J

l Una pena de tres años y un día de presidio menor en su grado mínimo dictó el Tribunal de Juicio Oral en Lo Penal de Antofagasta en contra de Brian Acuña Valenzuela, joven al cual encontró culpable del delito de receptación.

El condenado, de 20 años, deberá también pagar una multa de 5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), es decir, cerca de 200 mil pesos. Debido a que no se le concedieron beneficios, cumplirá la pena en forma efectiva.

Los hechos por los que acusó la fiscal Paola Acevedo ocurrieron el 2 de abril del año pasado, cuando Acuña Valenzuela fue sorprendido conduciendo un automóvil, conociendo o no pudiendo menos que conocer el origen ilícito del vehículo, que había sido sustraído. Quien lo descubrió fue un familiar de la víctima y, al verse sorprendido, abandonó la máquina y se dio a la fuga, no si antes amenazarlo con un arma blanca.

En el juicio el imputado reconoció haber manejado la máquina, pero dijo que no lo había robado y que se lo había pasado una persona amiga de la Feria Prat, la que no identificó. Agregó que cuando recibió el auto ya estaba desmantelado y que dormía en el vehículo cuando se acercó un conductor de colectivo, al cual amenazó con una tijera.

Tras analizar la prueba, los sentenciadores dieron por acreditado el delito y la responsabilidad que en él cupo al acusado. J

l Redacción

Su preocupación por un trágico accidente que no es el primero y, están seguros, tampoco será el último, expresaron vecinos de la Avenida Carlos Oviedo Cavada de Antofagasta, a raíz de la fatal colisión registrada el domingo en la esquina con calle Magallanes.

En la emergencia, ocurrida pasadas las 13 horas, perdió la vida María Cristina Julio Romero, de 68 años, quien viajaba como copiloto en el automóvil que guiaba por la segunda vía su esposo, Juan Araya Quiroga (69). La máquina colisionó con un taxibús de la línea 102 que luego volcó y chocó un poste, dejando como consecuencia cinco heridos.

Al unísono, los pobladores calificaron dicha intersección como un peligroso punto que pone en permanente riesgo no sólo su integridad física, sino que también sus bienes materiales, como casas y vehículos. "Nosotros estamos arriesgando; los que vivimos acá estamos intranquilos porque tenemos niños chicos", dijo uno de ellos.

Según los residentes del sector, la esquina en cuestión es una curva peligrosa que "tira" a los conductores hacia el poniente. Peor aún, es pan de cada día para ellos ver cómo los choferes que suben por Magallanes no respetan el doble signo Pare instalado en el lugar, lo que ha provocado un sinnúmero de emergencias de distinta gravedad.

El último- recordaron -lo protagonizó una camioneta que terminó sobre el tensor de un poste. "Quedó en el aire", indicaron los vecinos, para quienes la solución sería regular el tránsito con semáforos. También, dijeron, serían una buena alternativa lomos de toro por ambas arterias.

Ayer la directora (s) de Tránsito de la municipalidad, Daviana Godoy, explicó que se repondrá la señalización presente en esta esquina y se modificará la distancia sobre la cual está instalada el disco Pare del sector para brindar una mejor visibilidad a los conductores. J

l Redacción

Su preocupación por un trágico accidente que no es el primero y, están seguros, tampoco será el último, expresaron vecinos de la Avenida Carlos Oviedo Cavada de Antofagasta, a raíz de la fatal colisión registrada el domingo en la esquina con calle Magallanes.

En la emergencia, ocurrida pasadas las 13 horas, perdió la vida María Cristina Julio Romero, de 68 años, quien viajaba como copiloto en el automóvil que guiaba por la segunda vía su esposo, Juan Araya Quiroga (69). La máquina colisionó con un taxibús de la línea 102 que luego volcó y chocó un poste, dejando como consecuencia cinco heridos.

Al unísono, los pobladores calificaron dicha intersección como un peligroso punto que pone en permanente riesgo no sólo su integridad física, sino que también sus bienes materiales, como casas y vehículos. "Nosotros estamos arriesgando; los que vivimos acá estamos intranquilos porque tenemos niños chicos", dijo uno de ellos.

Según los residentes del sector, la esquina en cuestión es una curva peligrosa que "tira" a los conductores hacia el poniente. Peor aún, es pan de cada día para ellos ver cómo los choferes que suben por Magallanes no respetan el doble signo Pare instalado en el lugar, lo que ha provocado un sinnúmero de emergencias de distinta gravedad.

El último- recordaron -lo protagonizó una camioneta que terminó sobre el tensor de un poste. "Quedó en el aire", indicaron los vecinos, para quienes la solución sería regular el tránsito con semáforos. También, dijeron, serían una buena alternativa lomos de toro por ambas arterias.

Ayer la directora (s) de Tránsito de la municipalidad, Daviana Godoy, explicó que se repondrá la señalización presente en esta esquina y se modificará la distancia sobre la cual está instalada el disco Pare del sector para brindar una mejor visibilidad a los conductores. J

l Con gran pesar fue conocida el domingo la noticia del fallecimiento de Mirtha Elgueda Saavedra, conocida y querida vecina de la población Las Rocas de Antofagasta.

La pobladora dejó de existir a los 68 años a causa de una enfermedad contra la cual su cuerpo no pudo seguir luchando, sin embargo será recordada siempre por su valentía, generosidad con el prójimo y entrega a su familia, ampliamente conocida y apreciada en ese sector de la capital regional.

La recordada pobladora tenía tres hijos: Mirtha Cecilia, Héctor y Joselyn Macarena, quienes están siendo acompañados por familiares y amigos en tan tristes momentos.

Mirtha Elgueda, a quienes especialmente sus sobrinos recuerdan por su eterna alegría, incondicionalidad y estar siempre presta para aconsejar y acompañar cariñosamente a quienes lo necesitaran, fue velada en la capilla de la funeraria "Vida Nueva", ubicada en la intersección de las calles Copiapó y 14 de Febrero.

Más tarde su velatorio se trasladó a la I Iglesia Metodista de Antofagasta- Uribe 865 -, de la que fue una activa y estimada miembro. Hoy, a las 15 horas, tendrá lugar allí un responso luego del cual, a las 16.30 horas, el cortejo partirá rumbo al Cementerio General, donde sus seres queridos le darán el último adiós. J

l Con gran pesar fue conocida el domingo la noticia del fallecimiento de Mirtha Elgueda Saavedra, conocida y querida vecina de la población Las Rocas de Antofagasta.

La pobladora dejó de existir a los 68 años a causa de una enfermedad contra la cual su cuerpo no pudo seguir luchando, sin embargo será recordada siempre por su valentía, generosidad con el prójimo y entrega a su familia, ampliamente conocida y apreciada en ese sector de la capital regional.

La recordada pobladora tenía tres hijos: Mirtha Cecilia, Héctor y Joselyn Macarena, quienes están siendo acompañados por familiares y amigos en tan tristes momentos.

Mirtha Elgueda, a quienes especialmente sus sobrinos recuerdan por su eterna alegría, incondicionalidad y estar siempre presta para aconsejar y acompañar cariñosamente a quienes lo necesitaran, fue velada en la capilla de la funeraria "Vida Nueva", ubicada en la intersección de las calles Copiapó y 14 de Febrero.

Más tarde su velatorio se trasladó a la I Iglesia Metodista de Antofagasta- Uribe 865 -, de la que fue una activa y estimada miembro. Hoy, a las 15 horas, tendrá lugar allí un responso luego del cual, a las 16.30 horas, el cortejo partirá rumbo al Cementerio General, donde sus seres queridos le darán el último adiós. J

l Redacción

Su preocupación por un trágico accidente que no es el primero y, están seguros, tampoco será el último, expresaron vecinos de la Avenida Carlos Oviedo Cavada de Antofagasta, a raíz de la fatal colisión registrada el domingo en la esquina con calle Magallanes.

En la emergencia, ocurrida pasadas las 13 horas, perdió la vida María Cristina Julio Romero, de 68 años, quien viajaba como copiloto en el automóvil que guiaba por la segunda vía su esposo, Juan Araya Quiroga (69). La máquina colisionó con un taxibús de la línea 102 que luego volcó y chocó un poste, dejando como consecuencia cinco heridos.

Al unísono, los pobladores calificaron dicha intersección como un peligroso punto que pone en permanente riesgo no sólo su integridad física, sino que también sus bienes materiales, como casas y vehículos. "Nosotros estamos arriesgando; los que vivimos acá estamos intranquilos porque tenemos niños chicos", dijo uno de ellos.

Según los residentes del sector, la esquina en cuestión es una curva peligrosa que "tira" a los conductores hacia el poniente. Peor aún, es pan de cada día para ellos ver cómo los choferes que suben por Magallanes no respetan el doble signo Pare instalado en el lugar, lo que ha provocado un sinnúmero de emergencias de distinta gravedad.

El último- recordaron -lo protagonizó una camioneta que terminó sobre el tensor de un poste. "Quedó en el aire", indicaron los vecinos, para quienes la solución sería regular el tránsito con semáforos. También, dijeron, serían una buena alternativa lomos de toro por ambas arterias.

Ayer la directora (s) de Tránsito de la municipalidad, Daviana Godoy, explicó que se repondrá la señalización presente en esta esquina y se modificará la distancia sobre la cual está instalada el disco Pare del sector para brindar una mejor visibilidad a los conductores. J