El fin de semana es uno de los días en que el mal olor de las calles aumenta considerablemente. El más claro ejemplo es Brasilia, especialmente en el lugar donde está la Segunda Compañía de Bomberos, pues la pestilencia a pescado es bastante fuerte y parece que los feriantes no se preocupan de los desechos y los dejan botados por ahí.

Creo que las autoridades sanitarias deben preocuparse de este tipo de situaciones, pues somos varios los que a menudo caminamos por ese sector y terminamos con el estómago revuelto.

De verdad que es insoportable y se debe hacer algo, no es posible que pasen los años de la misma forma y que nadie fiscalice que se hace con estos desechos.

Fernanda Arriagada

Caminando por calle Grecia pasé por lo que iba a ser el shopping de Calama y de verdad que da pena ver cómo grandes proyectos que parecían buenos quedan a medias, porque empresas se adjudican obras, pero no cuentan con los dineros o la experiencia en este tipo de construcciones.

No quiero ser una de las personas que siempre critica, pero lamentablemente cada vez se nota el aumento del comercio sexual en las calles de Calama. Las promociones que se hacen cuando uno va a sacar dinero de los cajeros automáticos, basta ver cómo están plagados de estos papelitos.