Pasa un Gobierno tras otro y nadie hace nada para radicalizar las sanciones a quienes terminan con la vida de un carabinero. Hasta cuándo deben esperar esas familias por justicia.

Son hombres que finalmente día a día arriesgan su vida por brindar seguridad a desconocidos, esos mismos que luego le dan la espalda cuando deben luchar por justicia.

Es momento de dignificar el trabajo honrado de este grupo de hombres, que cada día sale de su hogar sin saber si hay un regreso. Pese a eso muy pocos son quienes valoran su labor. Esperemos algún Gobierno, sin importar del sector que sea, alguna vez destaque el rol fundamental que cumplen en la sociedad. Mis reconocimientos para esta noble institución.

Tamara Miranda

Estimados:

No sería nada de malo que los encargados de tránsito del municipio o quien esté a cargo de la sincronización de los semáforos se fuera a dar una vuelta por el mall.