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Harold contó las horas de angustia por un falso secuestro

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El martes, todo iba normal en el día de Eugenia Fernández, la esposa del ex presidente de la ANFP, Harold Mayne-Nicholls. Eso hasta que su celular sonó y desconocidos le pidieron dinero para salvar a uno de sus cinco hijos, a quien aseguraban tenían secuestrado.

Según comentó Mayne-Nicholls a soyantofagasta.cl, los estafadores estaban muy informados, pues en cuanto se comunicaron con su esposa le detallaron todos los antecedentes que tenían de la familia. "Manejaban información que uno supone privada y eso es preocupante porque evidentemente son datos que no utilizarán de la mejor manera", dijo el ex precandidato a la presidencia de la FIFA.

Durante la llamada Eugenia incluso habló con su supuesto hijo secuestrado, quien le pedía que lo ayudara y no lo abandonara.

La llamada parecía convincente hasta que el "secuestrador" le preguntó dónde estaba. Ella estaba en Santiago, pero nerviosa -y para despistar- respondió que en Antofagasta. En ese momento se produjo un hecho clave: hubo dudas y un largo silencio de los supuestos captores, que hicieron que la mujer sospechara del relato.

"En ese lapso mi señora se dio cuenta que algo extraño pasaba y tras un par de segundos el individuo le dijo que no importaba el lugar donde se encontrara porque ese era un asunto de dinero", relató Mayne-Nicholls a este medio.

Descolocada cortó la llamada e intentó comunicarse con su esposo. Sin embargo, Harold regresaba en un vuelo desde Antofagasta, por lo que no pudo responderle. "Colgó y llamó a mi hijo que estaba en la playa, luego de un par de minutos éste le respondió y le dijo que estaba bien, confirmándole que todo era un intento de estafa".

Mientras ella hablaba con su hijo, los delincuentes comenzaron a llamar al teléfono de su casa. "Aquí respondió la nana y le comunicaron con mi supuesto hijo, ella extrañada por la situación le preguntó cómo se llamaba y al no obtener respuesta notó que se trataba de algo extraño", manifestó el ex timonel del fútbol chileno.

"Cuando llegué a Santiago junto a mi señora llamé al número y el tipo que me respondió, me dijo que me estaba grabando y que iba a llevar todo lo que le dije a los medios para mostrar el tipo de persona que soy… Imagínate su desfachatez, como si él fuera la víctima".

Tras el mal rato Harold y su esposa dejaron la constancia en Carabineros. J

l Preocupado Mayne-Nicholls aseguró que cuenta su experiencia para evitar que estos casos afecten a otras personas.

"Es necesaria una campaña y una política nacional respecto al tema… hay que instruir a la gente y explicarles que no deben entregar información… Deben estar alerta y en caso de recibir una llamada de este tipo pedir la mayor cantidad de detalles posibles para así descolocar a los estafadores", finalizó.

l Paola Cataldo