Han sido más de 48 horas de angustia y pena para la familia de Rosalindo Araya Castillo, quien se encuentra en estado grave en la Clínica Bicentenario, en Santiago.
El panorama no es para nada alentador. Los profesionales médicos que están a cargo de su atención declararon muerte cerebral para este calameño, que el miércoles sufrió un accidente laboral.
Según manifestó su hermano Rodelindo Araya Castillo a través de las redes sociales, "Señor, cúbrelo con tu manto. Te pido de corazón que hagas tu santa voluntad en él".
La hija Rosalindo es quien lo acompaña y este viernes viajó su hermano junto a un funcionario del Colegio Juan Pablo Segundo, lugar donde se produjo el accidente.
En tanto, el establecimiento realizó una misa en nombre del colaborador del colegio y por la tarde, alumnos de cuarto medio del colegio hicieron una velatón.
A los padres y apoderados del colegio, se les envió un comunicado para informarles de la situación que está viviendo la familia del afectado como también la comunidad escolar.
"Nuestro establecimiento, se puso a disposición de la familia a fin de acompañar y cubrir todas las necesidades que esta requiera ante tan lamentable situación. De este modo, se procedió a entregar toda la ayuda necesaria para que la hija de Rosalindo acompañe a su padre", explicaba el documento.
También se está llevando a cabo cadenas de oración en nombre de este trabajador, que para muchos ex alumnos es un ejemplo de esfuerzo y dedicación.
Sin embargo, el pronostico no es el más alentador y su familia se está resignando para lo peor.
En este caso, solo un milagro podría ayudarlo y así continuar al lado de su familia y con todos los que lo rodea. J
l El año pasado, se llevó a cabo un accidente automovilístico, donde dos adultos y dos menores de edad fueron las víctimas fatales. Estas personas, eran familiares de Rosalindo y Rodelindo, por lo que nuevamente tienen que pasar por una situación bastante compleja. La pérdida de un nuevo ser querido está latente y aunque se están realizando todos los esfuerzos, la familia lo deja a la voluntad del Señor.
l Redacción