Mediodía en Antofagasta y estoy -como nunca- atrasado a la cita más importante del año. La nueva Miss Exponor, la hermosa Ayleen Soto, está en el Hotel del Desierto junto a toda la prensa para hacer el clásico piscinazo, pero yo voy en un taco. Un caballero no se comporta así, pero díganle eso a los semáforos.

Cuando llegué al Enjoy, ahí estaba ella, con un bikini fucsia infartante. Definitivamente la elección del jurado (Sebastián Rojas, nuestro hábil fotógrafo, fue representando a "La Estrella") fue demasiado acertada. La chica es capa: 22 años, estudia interpretación bilingüe en la Universidad Arturo Prat, y enfocada siempre en los estudios. "Solamente trabajo para Exponor", dice.

Con una sonrisa que nos dejó a todos locos, Ayleen venía como promotora de la empresa Orbinox, y consiguió dejar la corona de la Exponor para Antofagasta. Agradeció el cariño de toda la gente durante esta competencia por el reinado, porque la trataron súper bien. "Los chicos me llenaron de piropos. Toda mujer se siente muy elogiada cuando le dicen uno, la que dice que no es mentirosa", cuenta.

Ayleen también se dedica a su pasión, la danza. Ésta fue inculcada por su profesora, Rosita, y su mamá, Leslie Jara. "En Antofagasta hay pocas posibilidades de surgir porque hay pocas academias. Tendría que irme a Santiago a estudiar o perfeccionarme en la danza, que es lo que me gusta", explica. J

l A la hora señalada, la linda Ayleen se lanzó a las aguas de la piscina en el Enjoy. Los colegas de la prensa sacaron más fotos que nunca en toda la Exponor, y ahí se lanzó el piquero que nos hizo olvidar que se acerca el invierno. ¡Splash! Obviamente la acompañé, y debo decirles que estaba exquisita, espectacular, deslumbrante. Me refiero al agua, por supuesto.

l Don Coco, el cocodrilo