Traumático resultó el primer viaje que realizaba una menor antofagastina en taxibús, tras ser abusada sexualmente por un micrero.

El hecho se registró la tarde del sábado y fue pesquisado por oficiales de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la PDI Antofagasta, los que lograron la detención de M.A.A.A, de 62 años y con antecedentes policiales como autor del delito de abuso sexual, quien finalmente fue puesto en libertad por orden del fiscal de turno.

La estudiante de 14 años había abordado cerca de las 17 horas un microbús de la línea 107 del TransAntofagasta, con el fin de regresar a su casa. Sin embargo, no sabía dónde debía bajarse, ya que era primera vez que viajaba sola. La máquina avanzó en su recorrido hasta quedarse sola la adolescente y llegar al paradero de la línea, ubicado en el sector sur de la capital regional.

Allí el micrero vio que la niña estaba sola y la llamó para que se acercara a él, iniciando una conversación en la cual se enteró de asuntos personales y que era primera vez que tomaba una micro sola. Dicha situación la aprovechó para abrazaba, besarla en la boca y realizarle tocaciones en los pechos. La menor fue subida luego a otro microbús con destino a su hogar, donde contó lo ocurrido a sus padres. J

D os víctimas fatales dejó ayer una violenta colisión, registrada en la Ruta 5 Norte, diez kilómetros al norte de la exOficina Alemania.

Un automóvil particular y un bus de la empresa Ciktur impactaron allí de frente, dejando además dos heridos, ambos integrantes de la tripulación de la máquina interprovincial.

El accidente, cuyas causas son estudiadas por un equipo de la Sección Investigadora de Accidentes en el Tránsito (SIAT) de Carabineros Antofagasta, se desencadenó a las 9:20 horas en el kilómetro 1.179 de la Panamericana.

El bus, patente DRZH 21 y conducido por Jorge Alejandro Toledo Amoyao, cubría el itinerario Santiago- Antofagasta- Calama, mientras que en sentido contrario circulaba el vehículo marca Infinity placa HJLJ 67 que era manejado por José Luis Rojas Alcayaga de 53 años.

De ahí que la terrible colisión fuera frontal, aunque en el caso del vehículo menor el daño se concentró principalmente en el costado de su conductor, que fue identificado con el correr de las horas (anoche) debido a que no portada documentación al momento de las primeras acciones realizadas en el lugar por efectivos del Retén Alemania (M.C.)

A raíz del violento impacto ambas máquinas quedaron detenidas fuera la vía, la que fue cortada para las pericias de rigor y el trabajo de rescate de los cuerpos, siendo habilitado un bypass.

Junto con la trágica pérdida de su chofer, de 43 años y domiciliado en Caleta San Pedro de La Serena, Región de Coquimbo, Ciktur lamentó también que tanto el segundo conductor del bus, Juan Campos Castañeda (43), como el auxiliar Samuel Roa González (25), resultaran heridos y fueran trasladados hasta el Hospital 21 de Mayo de Taltal. Allí se constató que sufrieron lesiones de diversa consideración y quedaron en observación, fuera de riesgo vital.

PASAJEROS ILESOS

Pese a la violencia del accidente, que quedó graficada con los importantes daños de los móviles, los 42 pasajeros de la máquina salvaron ilesos y fueron trasladados en diferentes máquinas de la firma hasta Antofagasta, para que continuaran viaje.

En el procedimiento de rigor trabajaron además efectivos de la Primera Comisaría de Taltal, quienes pusieron los antecedentes a disposición de la Fiscalía Local de esa comuna. J

El de ayer fue el segundo accidente con consecuencias fatales que involucró a un bus de la empresa Ciktur en apenas tres días. El viernes, a las 20:15 horas, en el kilómetro 68 de la Ruta 25 colisionaron una máquina de la firma, que viajaba desde Valparaíso a Calama, y un camión 3 /4 que habría sobrepasado el eje de la calzada.

A raíz de la emergencia murieron un auxiliar del vehículo interprovincial y el conductor del camión. Ambas máquinas se incendiaron y el Labocar Antofagasta trabaja en la identificación de las víctimas, para lo cual serán necesarias pruebas de ADN.

Iris González Gamboa