Redacción
E n prisión preventiva quedó E.G.A., de 34 años, luego que fuera formalizado por tres delitos por la muerte del joven Pablo Canihuante Carrasco, de 24, registrada en la madrugada del domingo pasado en las afueras de una disco en Mejillones.
Este sujeto fue detenido ese mismo día, pero recién ayer fue formalizado debido a que el fiscal de turno David Cortés solicitó una ampliación de 48 horas para recoger nuevas evidencias para acreditar su participación en el hecho.
Así el fiscal adjunto Juan Castro Bekios, quien esta semana se hizo cargo de los delitos violentos, lo formalizó ayer por homicidio, porte ilegal de arma prohibida y lesiones graves en contexto de violencia intrafamiliar (VIF).
Por ello, y pese a que la defensa se opuso a la medida cautelar privativa de libertad, el magistrado Arturo Iribarren decretó la prisión preventiva porque el imputado "constituye un peligro para la seguridad de la sociedad" y fijó un plazo de 90 días para el cierre de esta investigación, que tendría como móvil los celos.
Disputa
La disputa entre ambos se debió a que la víctima mantenía una reciente relación sentimental con la ex conviviente y madre del hijo del imputado.
De hecho la mujer se encontraba presente en el momento de la violenta riña e intentó calmar los ánimos, evitando que su ex pareja disparara pero fue alejada de un manotazo, cayendo al suelo y quedando con heridas leves.
Ambos sujetos habrían tenido inicialmente una discusión al interior de la disco, la que más tarde continuó en las afueras del local nocturno y terminó cuando el imputado habría efectuado un disparo que impactó en la parte dorsal izquierdo de la víctima, ocasionándole daño pulmonar y arterial que minutos después le provocaron el deceso.
El arma, tipo fusil marca Remington, utilizada en este hecho pertenece al imputado y no a la víctima como él declaró en un principio ante la policía.
También se descartó que el mortal disparo se produjera en medio de un forcejeo, ya que el imputado en una posterior declaración reconoció haber sacado el arma que portaba en su vehículo y utilizado para amenazar a la víctima apuntando siempre hacia abajo, lo que tampoco se condice con la lesión de la víctima que -según las pericias del Servicio Médico Legal- fue ocasionada por un disparo proyectado de abajo hacia arriba.
El arma fue levantada del sitio del suceso por una persona allegada a los participantes en la riña y posteriormente entregada a la policía.
Amenazas
El imputado habría recibido amenazas de muerte una vez que ingresara al recinto penal, por lo que su defensa solicitó en su formalización mayor seguridad. El magistrado accedió dicha solicitud y ordenó a Gendarmería aplicar las medidas correspondientes.
El imputado tiene antecedentes por microtráfico ilícito de drogas, mientras que su víctima mantenía antecedentes por homicidio frustrado y lesiones leves
90 día fue el plazo fijado por el tribunal para el cierre de este compleja investigación.
La Estrella de Antofagasta
