Redacción - La Estrella del Loa
Circulaba en compañía de su mejor amiga la bicicleta, cuando fue interceptado por dos delincuentes.
Pasadas las 21:00 horas, un hombre de 22 años transitaba por calle Coquimbo, cuando al llegar a la intersección de calle Colo Colo se encontró con dos sujetos, que según la versión de la víctima, eran de nacionalidad extranjera.
Paseaban con un perro, el que se acercó de forma agresiva obligándolo a disminuir la velocidad de su vehículo.
Ese fue el momento propicio que aprovecharon los delincuentes para abordar al afectado, quien sabía que no se acercaban con las mejores intenciones.
Lo que comenzó con una intimidación con el can, luego se transformó en una total reducción de la víctima cuando los asaltante extrajeron de entre sus ropas un arma, aparentemente de fuego.
Completamente reducido y en evidente inferioridad numérica, el hombre no tuvo más opción que acceder a las peticiones de los delincuentes.
Le solicitaron hacer entrega de todas sus especies de valor. En ese momento entregó el dinero en efectivo que portaba, además de su equipo celular.
Pero el botín era escaso y los delincuentes habían ido por más. No encontraron nada mejor que además arrebatarle las zapatillas que vestía al momento del asalto.
Antes de retirarse del lugar, los antisociales remataron sustrayéndolo también su bicicleta, medio de transporte que utilizaba a diario.
Concretado el ilícito, los ladrones se perdieron en medio de los pasajes del sector.
El afectado una vez superado el susto, concurrió hasta la comisaría a fin de realizar la respectiva denuncia.
Los escasos antecedentes que entregó de los delincuentes, impidieron que se pudiera realizar un recorrido por el sector para intentar dar con el paradero de los responsables.
La recomendación es entregar características de los antisociales, esto facilita el trabajo policial y además permite que se geste una detención oportuna de quienes son responsables de estos ilícitos.
Dos fueron, los delincuentes que atacaron al muchacho cuando iba en dirección a su hogar.
Un perro, utilizaron para intimidar a la víctima para luego reducirlo con un arma de fuego.