Secciones

Detenidos dos sospechosos de macabro crimen de Ojo Opache

Sujetos serían los responsables del asesinato de Freddy Orellana Pérez. Hoy deberán enfrentar a la justicia.
E-mail Compartir

Redacción

El tiempo avanzaba y quienes serían los responsables del asesinato más macabro del que se tenga recuerdo en la última década sentían que habían logrado burlar a la justicia.

Por poco más de un mes pudieron hacer gala de que habían cometido un crimen perfecto. No habían dejado huellas que permitieran dar con su paradero.

No sabían que la Fiscalía y personal especializado de Carabineros siempre les siguió los pasos muy de cerca. Solo esperaban la obtención de pruebas concretas que los vincularán con la brutal muerte de Freddy Orellana Pérez.

Cada uno de sus movimientos eran observados. No pensaron jamás que desde el propio grupo llegaría la prueba más clara en este puzzle policial.

El pasado jueves uno de los presuntos responsables del homicidio del "Negro Freddy" se quitó la vida.

El suicidio

Iván Briceño Donoso estaba en su hogar y quiso supuestamente desafiar al destino jugando a la ruleta rusa. En el primer tiro perdió la vida.

¿Pero cómo puede existir relación clara entre este hecho policial y la muerte de Orellana Pérez? Fue el calibre del arma el que permitió obtener la conexión que las policías y el Ministerio Público llevaban semanas buscando.

"Hace una semana hubo un suicido en Calama y concurrimos, esa fue el arma que fue periciada y esa arma fue la que nos permite al hacer las comparación establecer que fue la misma arma que estuvo involucrada en la muerte de Freddy", explicó el fiscal Jefe de Calama, Cristian Aliaga.

Era un arma calibre 38, la misma con la que percutaron dos tiros en la cabeza de Freddy. La misma munición fue la que se encontró en el cuerpo de Iván.

Los primeros indicios ya eran concretos. Restaba que las pruebas científicas ratificaran que se trataba de la misma munición y el círculo se cerraba entorno a los hasta ahora responsables del crimen de Ojo Opache.

El trabajo de personal de Labocar arrojó los resultados esperados. El arma era la misma, ya no había dudas. Al parecer los responsables del asesinado del Negro habían sido identificados.

EL vehículo

La noche del pasado sábado 25 de junio quedó al descubierto un hecho que quedará marcado en la historia policial de la ciudad.

Un hombre era encontrado al interior de una cueva en el sector de Ojo Opache con sus extremidades atadas con esposas y cadenas, con sus pies adosados al suelo con estacas, además de presentar gran parte de su cuerpo quemado.

Resultaba difícil dar crédito a tanto ensañamiento, más cuando con el correr de los días se confirmó que la víctima había sido ejecutada con dos tiros en la cabeza .

Clave resultó la información aportada por testigos, quienes se percataron de la presencia de un vehículo en el sector con tres hombres. Luego observaron que desde una cueva salía humo.

Al día siguiente regresaron al mismo punto pensando que se trataba de una quema de cobre y que podían obtener algo de metal. Pero lo que encontraron los dejó perplejos.

El trabajo de investigación fue arduo y obligó a realizar la triangulación de antecedentes que permitieran dar con los responsables.

Una de las primeras pistas que se trabajó en el caso fue la presencia de un vehículo en el sector de Ojo Opache.

Fue la descripción de testigos la que permitió identificar no solo el modelo, sino que también otros importantes detalles claves.

"En el sitio del suceso se aportan detalles de un determinado vehículo, la diligencias de Carabineros dan con el modelo marca y patente, luego obtenemos algunas fijaciones, fotografías y videos, con lo que observamos pudimos identificar a quienes aparecían en estas imágenes", agregó el fiscal Aliaga.

Se comenzaron a ubicar imágenes en las estaciones de servicio con las características del móvil hasta que se pudo identificar y vincular al hecho.

El puzzle estaba prácticamente armado, solo faltaba asestar el golpe final. Ese que permitiría concretar la capturar de los responsables.

La detención

"En horas de la tarde (ayer) con personal de OS-9 de Iquique y Labocar de Antofagasta procedimos a la detención de dos personas que para nosotros después de este mes investigando tenemos indicios bastante científicos que tendrían participación en la muerte de Freddy Orellana ocurrida ya hace más de un mes", puntualizó el fiscal jefe.

Período investigativo que permitió reunir evidencias que permiten establecer las presuntas responsabilidad de los dos detenidos en este macabro crimen.

"Tenemos videos, pruebas de armamento, tráficos de llamados y todos eso nos ha permitido reconstruir lo que pasó con Freddy a objeto de establecer quienes serían los responsables detrás de su muerte", acotó Aliaga.

El trabajo realizado durante todo este periodo le han permitido a la Fiscalía reunir los antecedentes necesarios para formalizar a estos dos detenidos y además pedir medidas cautelares gravosas.

El homicidio más impactante de la última década en la ciudad comienza a ser aclarado.

El fiscal destacó el trabajo realizado en conjunto con las unidades especializadas de Carabineros.

"Hemos estado trabajando todo un mes con personal del OS-9 y Labocar, yo creo que eso demuestra el profesionalismo de Carabineros, la coordinación con nosotros. Analizamos y en este caso hemos tenido en poco tiempo para un hecho tan grave que se da en la ciudad, alguna dosis de suerte, pero lo que hay detrás es trabajo, pero no solo de los oficiales, sino que de todo un equipo", preciso.

Será materia de investigación establecer si el desenlace fue premeditado o un hecho que se escapó de sus manos. Hoy los supuesto asesinos enfrentarán a la justicia por la muerte del Negro Freddy.