Cortes mal organizados

Señor director:

Entiendo que el costo del progreso genera para los usuarios algunas molestias, pero uno está dispuesto a asumirlo por el bienestar de la ciudad, sin embargo cuando esto va de la mano con hacer mal las cosas, definitivamente genera más de una molestia y uno no logra comprender por qué se actúa de esa forma.

Es lo que está ocurriendo con los arreglos en Balmaceda. Para quienes viven en el sector suroriente se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza, porque bloquearon todas las vías de acceso a supermercados y mall. Actualmente está funcionando solo una sola pista de circulación por Antofagasta y Chorillos, por lo que se ha generado un verdadero caos vial.

Uno podría preferir vías alternativas, sin embargo las calles al norte también están cortadas hasta llegar a Avenida Grau, entonces la opción que queda es ir hasta calle Atacama y bajar Balmaceda, luego seguir ir por detrás del casino y recién llegar a destino, una vuelta gigante.

Repito, se entiende que es para del progreso, pero podrían haber cortado Chorrillos, terminado los arreglos y empezar con Antofagasta y así de forma paulatina. Y lo que genera más indignación es que como las autoridades no hacen su trabajo y además contratan a puras empresas que les terminan viendo la cara, lo más seguro es que esos trabajos duren años, porque quebrarán, quedarán sin dineros o abandonarán las obras como siempre pasa en Calama. Deberían contratar a profesionales del área, pero tengan capacidad de razonar y evaluar este tipo de situaciones... Ah y podrían decirme dónde mando los gastos extras de bencina de todos estos meses también.

Carlos Valderrama

Ley reservada del Cobre

Señor director:

Creo que ya es hora que las autoridades se pongan las pilas y de una vez por todas deroguen la Ley Reservada del Cobre.

Hoy la industria atraviesa por uno de sus peores momento y lo que se necesita es evitar que tantos recursos se pierdan. Y digo se pierdan porque después de lo que supimos del "milicogate" uno piensa que los dineros no se invierten justamente en seguridad nacional.

Ahora necesitamos recursos frescos para cosas más importantes como educación y salud.

Carmen González