Calama no obtuvo el mejor de los resultados en el Indice de Calidad de Vida Urbana (ICVU) 2016, elaborado conjuntamente entre el Núcleo de Estudios Metropolitanos del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica (PUC) con la Cámara Chilena de la Construcción y es que quedó en el lugar 70 de 93 comunas evaluadas, bajando cinco puestos en comparación al 2015.
Fue en el auditórium de Inacap, donde el profesor asociado del Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Arturo Orellana, detalló los alcances de este estudio que cada año se realiza a partir de datos objetivos que se agrupan en seis dimensiones como son: Vivienda y Entorno, Conectividad y Movilidad, Salud y Medio Ambiente, Condición Laboral, Condiciones Socioculturales y Ambiente de Negocios.
Respecto al resultado que logró la comuna de Calama en este estudio, Orellana enfatizó que se debe "al deterioro progresivo de la calidad de vida que se explica por una aparente menor inversión pública y privada en razón de la escala de desarrollo urbano en que se encuentra la ciudad".
Agregó que igualmente el desarrollo urbano que se proyecta para Calama pasa por contar infraestructura y equipamientos que aumente el interés de residir para todos los estratos sociales en áreas como la educación, cultura, salud y entretenimiento.
"En la vida de barrio y la cantidad y calidad de la vivienda se está al debe. Calama no puede seguir siendo una ciudad campamento", expuso el profesor de la PUC.
Por este motivo, es que invitó a las autoridades comunales a diversificar la base económica local y el mercado del trabajo para "retener y atraer al mismo tiempo un capital humano avanzado, y evitar así la migración de los estudiantes y trabajadores".
Finalmente puntualizó que se debe definir "una estrategia para que el proceso de descentralización político y administrativo en curso no derive en un centralismo regional en torno a su capital. Eso sería grave y no ayudaría al desarrollo real que se quiere para las comunas del país", recalcó Orellana.
Visión regional
El presidente regional de la Cámara Chilena de la Construcción Calama, Carlos Ramírez, manifestó que "pese a este resultado, tengamos claro que este instrumento de medición y gestión no buscó sesgar ni mimetizar la realidad que vivimos a diario".
Agregó que "este instrumento buscó más bien convertirse en una herramienta más para que todos los actores de la comuna, desde sus respectivos ámbitos, trabajen para ir cerrando aún más las brechas de calidad de vida y desigualdad que existen en muchas comunas del país y en la cual también está nuestro Calama".
De este modo, Ramírez dijo que ahora queda el desafío de contar con una comuna próspera y desarrollada, para así mejorar objetivamente la calidad de vida y de las generaciones que vendrán en la capital minera.
Estudio a nivel nacional
Este año se estudiaron 93 comunas con más de 50 mil habitantes, diez áreas metropolitanas, 25 ciudades intermedias y todas las capitales regionales.
Osvaldo Vega Carvajal
osvaldo.vega@estrellaloa.cl