Emol - La Estrella

Gonzalo Espinoza no lo pasó nada bien mientras estuvo bajo el mando de Sebastián Beccacece en Universidad de Chile. El volante fue marginado dos veces del plantel por el ex ayudante de Jorge Sampaoli, la última de manera definitiva tras el polémico asado de La Pintana.

Sin embargo, en diálogo con Las Últimas Noticias, el jugador afirma no tener rencor contra el DT. "Nunca le deseé mal". Aunque también dio algunas de las razones que, según él, significaron el fracaso de Beccacece como entrenador de los azules.

"Sería fácil darle en el piso en estos momentos, pero yo debo decirte que trabajaba bien. Quizás eran otros los factores. (...) Su poca experiencia, quizás, lo perjudicó para dirigir a la U. Es un equipo grande y es difícil manejar un grupo como la U, que tiene futbolistas de vasta experiencia". reconoció Espinoza.

Por otro lado, la partida del entrenador le abre una oportunidad al mediocampista de retornar al cuadro laico, situación que lo tiene "ilusionado".

"(Volver a la U) es lo que más quiero. Me he ido poniendo a tono en lo futbolístico. En Chile, en lo físico, estaba bien. Quiero volver al nivel que tuve. Me costó tomar la decisión de venir a Argentina porque había otros equipos interesados".

"Me enteré de que existe una cláusula según la cual la U me puede recuperar. Cuando supe eso, me ilusioné con poder volver. Por eso tengo que hacer bien las cosas acá. Quiero mi revancha. Tengo muchos amigos allá y me siento en deuda con el club", complementó.

Por último, Espinoza aprovechó de clarificar que "el asado nunca fue por mi cumpleaños. De los que marginaron, yo era el único titular del equipo. Es cierto que por el momento que vivía la U no fue afortunado hacerlo, pero el tiempo fue aclarando todo".

Ayer Azul Azul emitió un comunicado en donde oficializaron la salida del técnico y ratificaron que a partir de ahora se enfocarán en la búsqueda del sucesor de Beccacece. Aunque Marcelo Jara y Esteban Valencia asumirán de manera interina hasta que confirmen al nuevo estratega.

Ya ha pasado casi un mes desde que el Manchester City oficializó la llegada del portero chileno Claudio Bravo, pero en Europa su salida del Barcelona sigue dando que hablar.

El también capitán de la "Roja" dejó el cuadro catalán en medio de supuestos conflictos con el guardameta alemán Marc André Ter Stegen, con quien competía por la titularidad en el arco "culé", a pesar de que cada uno era estelar en ciertas competiciones.

Sin embargo, fue el propio Bravo quien se encargó de salir a aclarar su relación con el arquero germano.

"La presencia de Ter Stegen no tuvo nada que ver con mi marcha. No teníamos mala relación. De hecho creo que nos beneficiábamos mutuamente", comentó el chileno en entrevista con el programa El Larguero de la Cadena SER de España.

"A mí lo que pasa fuera del campo ni me molesta ni me incomoda. Yo presiono al técnico en los partidos y en los entrenamientos", enfatizó.

"Yo fui sincero. No quería estar en la banca, continuar cobrando y hacer daño a la institución, que siempre me ha tratado muy bien", complementó Bravo.

El debate de siempre. ¿Quién es el mejor del mundo, Lionel Messi o Cristiano Ronaldo? Muchos han opinado y ahora fue el turno de uno de los que luchan por ser el más destacado de todos los tiempos.

Es Pelé, quien ya tiene su preferencia. "Cristiano Ronaldo es un gran goleador pero en términos de jugador completo no hay ninguna duda de que Messi es el mejor", considera "O Rei" en declaraciones que publican en España.

Agregó en su análisis diciendo que "para mí Messi ha sido el jugador más regular en los últimos diez años. Se podría hablar de otros jugadores como Cristiano Ronaldo, que es un gran goleador. Me recuerda mucho a Ronaldo. Al final Cristiano Ronaldo logra goles y a Messi le ves dar asistencias y crear juego, además de marcar".

La discusión sigue. Messi ha ganado cuatro Balón de Oro como el mejor del mundo y Cristiano dos.

Sin dudas son los dos jugadores que más dominan en el último tiempo y que llevan su rivalidad también en sus clubes, donde disputan el clásico Barcelona - Real Madrid.