Ignacio Araya Chanqueo
Todavía faltaba media hora para la Nochebuena cuando sonó el teléfono de Victoria Callo con la noticia. Sus dos locales en la Vega Central de Antofagasta estaban siendo reducidos a cenizas por un incendio imparable que, además del suyo, consumía tres puestos de ese centro comercial. Doña Victoria llegó allá cuando los bomberos ya habían apagado el fuego y "Comercial Sánchez" se había convertido en un montón de fierros chamuscados.
La dueña de los locales se ve cansada. El domingo estuvo hasta las 11 de la noche repletando cuatro veces un camión que se llevó los escombros quemados. "Mire, estuve mal, pero hoy ya estoy con la cabeza despejada", dice Victoria, resignada mirando los restos del local que se dedica a la venta de abarrotes al por mayor. Ella calcula que por lo menos 100 millones de pesos se perdieron en el incendio, aunque parte de ello lo va a cubrir el seguro.
Aunque en la Vega Central aún no han recibido el informe oficial de parte de Bomberos, todo apunta a que el desastre se produjo por un problema eléctrico. Victoria Callo cuenta que cerca de su local había otra instalación eléctrica muy precaria. "Yo acá había hecho instalación nueva completa, como tengo muchas máquinas... incluso algunas que ni siquiera se han pagado", se lamenta.
"Las máquinas de rotisería, las congeladores, todo se quemó. Acá hay que demoler todo", dice la empresaria. Lo único que se salvó de milagro fue su tercer local ubicado justo al frente de los afectados, donde la maquinaria está en perfectas condiciones, salvo las obvias huellas de lo ocurrido. "El incendio llegó hacia el techo, pero gracias a Dios que para abajo no pasó", comenta. Ayer ella ya venía pensando en volver a levantar sus locales, que hará con la ayuda de su hijo arquitecto. La rotisería -la única que escapó de este infierno- podría estar abriendo el miércoles o jueves, dice.
Reconstrucción
Todo el día estuvo trabajando ayer Pedro Astudillo, a cargo de Carnes Astudillo. Su local quedó arrasado por las llamas y los frigoríficos de años de esfuerzo se fueron con el fuego. Lo peor, es que no tenía seguros. "Hay que armar todo lo que es infraestructura, local comercial completo", decía en voz baja.
Ayer ya habían traído las primeras herramientas para echar a andar de nuevo la carnicería de Pedro Astudillo. El comerciante dice que espera tenerlo "lo más pronto posible", proyectando su reapertura de aquí al viernes, en un trabajo titánico. "Ese día ya estaremos abriendo el local", asegura.
En tanto, según Leandro Müller, presidente de la Sociedad Comercial Vega Central, la administración ha sostenido reuniones con los dueños de los locales siniestrados para colaborar internamente. Asimismo, agradeció a Bomberos, Carabineros y comerciantes por la ayuda prestada después del dramático incendio.
Cuatro locales fueron arrasados por las llamas: "Frutos del País", "Comercial Sánchez" y "Carnes Astudillo".