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Datos de la Encuesta Casen 2015 fueron mejores a lo esperado

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Los seremis de Trabajo y Desarrollo Social, Pablo Rojas y Loreto Nogales respectivamente entregaron ayer los resultados regionales de la Encuesta Casen 2015, destacando que la tasa de desempleo se mantuvo en un 6,9% respecto del 2013 y según sexo es más bajo que la media nacional: 6,3% en hombres y 7,75% en mujeres.

Pero esa no fue la única cifra positiva que ayer Rojas y Nogales entregaron en un punto de prensa en el Balneario Municipal de Antofagasta, sino que además el ingreso promedio mensual registró un alza respecto a la Casen 2013. "Pasamos de sueldos de 568 mil pesos a mensualidades promedio de 586 mil pesos", aseguró Loreto Nogales, seremi de Desarrollo Social.

También es destacable la información de capacitación de la población ocupada, que en la región sobrepasa las cifras nacionales. Mientras a nivel nacional es de 16,1%, en la región es de 21%.

En ese sentido, Pablo Rojas, seremi del Trabajo, confirmó que "el mundo laboral cada vez es más dinámico y necesitamos que nuestra población tenga personas calificadas, certificadas y permanentemente capacitadas".

La autoridad relevó las políticas de incentivo al empleo que han contribuido en mejorar los índices laborales de la Casen. Por ello, valoró el subsidio al Empleo Joven, Bono al Trabajo de la Mujer, el Programa de Fortalecimiento OMIL, el programa +Capaz, entre varias más.

El plan de trabajo que busca cuidar al Gaviotín Chico

Profesionales determinaron las amenazas y medidas que hay que implementar para cuidar a esta pequeña ave.
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Javier Andrónico Cangana

El lunes recién pasado, en Mejillones, se desarrolló el segundo taller que busca determinar los sitios de nidificación del gaviotín chico y las amenazas que día a día tiene que soportar esta pequeña ave que sólo habita en algunos sectores del Norte Grande y la costa peruana.

A este taller asistieron varias autoridades del Ministerio del Medio Ambiente, representantes de agrupaciones, pescadores artesanales, entre otras personas relacionadas a la costa mejillonina para compartir opiniones y coordinar un plan de trabajo para que el gaviotín no se extinga y pueda seguir viviendo sin problemas, especialmente entre Hornitos y Antofagasta, uno de los lugares donde se han encontrado nidos de esta ave.

Años de experiencia

Uno de los profesionales e investigadores que estuvo en el taller es Carlos Guerra, biólogo y miembro de la consultora mediambiental, Search, quien contó a este Diario que "lo que está haciendo este gobierno con este tipo de instancias es crear un plan de cómo abordar la conservación del gaviotín chico, considerando la experiencia adquirida las últimas décadas".

Por "décadas", el académico se refiere principalmente a los últimos 15 años, ya que confirmó que recién desde el 2002 esta ave en peligro de extinción comenzó a recibir la atención necesaria y su cuidado pasó a ser un ítem relevante de todos los estudios de impacto ambiental que las empresas que querían instalarse en la costa -principalmente termoeléctricas- debían cumplir.

"En los '90 prácticamente nadie sabía donde estaba el gaviotín chico. Se sabía que existía pero eran tan poquitos que sólo algunos lograban divisarlos en estos sectores. Entonces, cuando las primeras termoeléctricas empezaron a instalarse se les solicitó que abordaran esta problemática, es decir, investigaran dónde anidaban, cuántos había, etc", indicó el biólogo antofagastino.

Luego de ocho horas, el taller sobre el cuidado de esta pequeña ave finalizó con varias determinaciones, tales como sus amenazas y formas de combatirlas.

Amenazas

Respecto a las amenazas que día a día tiene el gaviotín chico, las principales, dijo Guerra, son las industrias que se instalan en el borde costero y/o la construcción de viviendas sin un plan regulador adecuado, ya que pasan a llevar los delicados nidos.

Otro efecto dañino y que ha sido denunciado en varias oportunidades son las personas que con sus vehículos entran -sin saber- a los lugares donde esta ave pone sus huevos.

Y la tercera amenaza es la constante presencia de perros abandonados que rondan las posadas y acompaña a mariscadores. Sin embargo, Carlos Guerra aseguró que los canes no siempre se comen a estos polluelos, la mayoría de las veces sólo los matan.

Medidas

Las medidas para preservar al gaviotín chico fueron englobadas en siete grupos, donde las principales se basan en la educación y concientización, tales como charlas en establecimientos educacionales en toda la región; definir los territorios de nidificación y que las personas no ingresen a ellos -y si lo hacen sean multados- y tratar de disminuir la cantidad de canes sin hogar.

"Desde ahora seguiremos estudiando el tema para que esta tradicional ave pueda vivir tranquila", dijo Carlos Guerra.

861 individuos de estas aves se contabilizaron entre Hornitos y Antofagasta en 2015.

2007 Desde ese año diversas autoridades y organismos estudian sistemáticamente al gaviotín.

javier.andronico@estrellanorte.cl