Trabajadores que realizaban labores de prospección minera, descubrieron en medio del desierto un artefacto explosivo.

"Un equipo que realiza trabajos de geología en Chiu Chiu en un sector desértico, manifestó que habían encontrado una munición, material de guerra abandonado en el lugar", explicó el mayor de Carabineros, Felipe Neira.

Hasta el lugar concurrió personal del GOPE a fin de adoptar el procedimiento y seguir los procesos establecidos.

"Conforme a protocolos establecidos, realizó una detonación controlada a fin de eliminarlo desde el lugar en que estaba, pese a que era desértico", agregó Neira.

El objetivo es eliminar cualquier riesgo de personas que pudieran haberlo manipulado por error.

El comienzo del juicio estaba fijado para el pasado lunes 13 de marzo, sin embargo nuevamente fue retrasado.

El caso que remeció a toda una comunidad en diciembre de 2014 sigue sin ser resuelto por la postergación del proceso judicial.

Desde aquella fecha permanece detenido el hasta ahora único imputado.

Se trata de C.R, padre del menor y quien es sindicado como el responsable de la muerte del pequeño.

Falta de resultados en algunas pericias, retraso en la entrega de informes, entre otros han sido la causas que han llevado que luego de dos años y dos meses, el juicio no se haya concretado.

Los hechos quedaron al descubierto los primeros días de diciembre, cuando una presunta desgracia por la desaparición de un menor de dos años alertó a Carabineros.

La ciudad entera se movilizó para intentar dar con su paradero. Nadie perdía la esperanza de encontrarlo con vida.

Sin embargo, el desenlace de este caso fue el que nadie quería. El niño fue encontrado fallecido en el sector poniente de la ciudad.

Su cuerpo presentaba claros signos de haber sido asesinado. Ahí comenzó a escribirse un nuevo capítulo en esta historia.

Fue el padre quien llevó a la policía al sector donde se encontraba el cuerpo, sin embargo jamás reconoció haber sido el responsable.

Por el momento el terminó del caso se aplazó hasta el mes de junio. Todo está por verse.

Redacción - La Estrella del Loa

Hubo una mezcla de sentimientos en la formalización de cargos contra el único imputado del homicidio del colectivero.

Los familiares que asistieron a la audiencia de formalización querían saber qué ocurriría con el supuesto asesino.

Un joven de 20 años, que era parte de su propia familia, pese a eso no le tembló la mano para quitarle la vida a su misma sangre.

Con el correr de las horas se conocieron nuevos detalles del asesinato del conocido conductor de la línea 32.

"Tanto la víctima como las personas involucradas tenían cierto grado de parentesco, de hecho todos eran parte de una localidad rural, específicamente de Socaire. De esa forma siempre tuvimos la identificación del sujeto", explicó el mayor de Carabineros, Felipe Neira.

La víctima, cuyo cuerpo permanece en el Servicio Médico Legal a la espera de autopsia, le comentó al resto de los comensales que el imputado lo había apuñalado.

Finalmente no dieron real importancia a las lesiones y siguieron consumiendo alcohol. Incluso víctima y victimario pernoctaron en el mismo domicilio.

"Conforme a las pruebas testimoniales que hemos recogido, él (imputado) se mantuvo en el domicilio incluso durmió en la misma pieza donde estaba la persona que durante la noche habría fallecido producto de la lesión punzante recibida", agregó Neira.

Lo llamativo es que pese a compartir el mismo espacio, nadie se percató del deceso de Nelson Cruz. "En la mañana se retira a trabajar (imputado) tampoco se enteró de la lesión habría resultado en la muerte del familiar. Había durmiendo otra persona que tampoco se percató del fallecimiento", remató Neira.

El restos de los comensales en la vivienda se presume presenciaron el ataque y serían testigos de lo ocurrido.

Ayer F.C.C de 20 años enfrentó a la justicia por el delito de homicidio. Se decretó su prisión preventiva como medidas cautelar además de 70 días para la investigación de este asesinato.

70 días para investigar, fue e plazo que decretó el Tribunal en este homicidio.

20 años tiene el presunto homicida. No tienen antecedentes por otros ilícitos.