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La profesora que entrega una beca en honor a su madre

La docente Estela Moya destina parte de su tiempo libre a enseñar estadística a alumnos del Liceo Marta Narea Díaz. A modo particular brinda una beca anual a un estudiante destacado para que pueda solventar gastos universitarios.
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Claudia Cáceres G.

Brindar oportunidades para que más jóvenes puedan llegar a las universidades tradicionales en igualdad de condiciones es el sueño que el año pasado comenzó a gestar Estela Moya Lara, académica de la Universidad de Antofagasta (UA), quien por voluntad propia decidió impartir clases complementarias a un grupo de estudiantes del Liceo Marta Narea Díaz, ex Liceo de Niñas de Antofagasta.

Es así como todos los jueves de cinco a seis de la tarde, 11 alumnos se reúnen sagradamente con Estela para preparar la PSU en el área de estadística. Pero Estela no sólo contribuye con su tiempo y conocimientos a la preparación de los estudiantes, sino que también - y de manera particular - al finalizar el curso entrega la beca de mantención 'Estela Lara Salazar', en honor a su madre.

La beca la recibe el mejor estudiante del curso complementario, para que pueda solventar gastos propios de la educación superior como lo es la locomoción, alimentación, materiales, fotocopias, entre otros.

El incentivo busca que los jóvenes sepan que sí es posible ingresar a una casa de estudios tradicional, y que con perseverancia y esfuerzo pueden llegar a ser grandes profesionales, independiente del establecimiento del cual hayan egresado.

Vocación

Estela es de profesión estadístico, titulada de la Universidad del Norte (actual UCN), con más de 25 años de docencia, dos postgrados y una amplia experiencia en el área. Actualmente realiza clases de media jornada a las carreras del área de salud e ingeniería de la UA, como también ejerce como profesora hora en la UCN.

No obstante y pese a su ajetreada agenda, decidió a mediados del año pasado asumir un compromiso social y retribuir con sus conocimientos al liceo que la vio crecer en su época de adolescente.

"Es una idea que tenía hace mucho tiempo dando vueltas en mi cabeza. Mi madre, Estela Lara Salazar, fue ex alumna del Liceo de Niñas, mi hermana y yo también fuimos ex alumnas y se me ocurrió en un momento en que estábamos en un almuerzo de aniversario del liceo en agosto de 2016. Quería hacer reforzamientos y ofrecer una beca, en honor a mi madre", cuenta Estela.

Dice que siempre tuvo ese 'bichito' de aportar con un granito de arena al liceo en el que estudió, realizando clases de estadística, ya que "en los liceos municipales y también algunos particulares, no se hace estadística. Los profesores no lo ven y en la prueba de PSU entra mucho, entonces me preocupaba que no lo impartieran en enseñanza media; generalmente lo dejan al final por el tiempo, por los paros u otras situaciones".

Con esa idea en mente, fue donde la directora y le planteó el proyecto. "A ella le encantó y empezamos con el proyecto en septiembre de 2016 con siete alumnos, tres de ellos ingresaron a la UA (...) Es algo que me nació como ex estudiante, pero también llevando el nombre de la Universidad de Antofagasta".

Cuenta que le comentó a la directora que escogiera a los mejores estudiantes de matemática de cuarto medio. "Para realmente sacarles un provecho a los niños en estadística. Ellos tuvieron una recepción muy buena, estaban muy contentos que yo fuera y más aún de manera voluntaria (...) Empezamos con todo el análisis estadístico, pero yo les enseño como si fueran de primer año de universidad, entonces están felices porque sienten que pueden saber algo más".

En clases Estela les enseña sobre recopilación de datos, clasificación, interpretación y presentación, que dan la posibilidad de tomar decisiones válidas, independiente de los contenidos. "Cuando después los niños tomen decisiones, cuando enfrenten un problema en su determinada expertise o en la vida cotidiana dirán 'ah, voy a tomar esta decisión porque la estadística me da estos parámetros de comportamiento. Si uno no tiene la base de los comportamientos no puede tomar decisiones'", dice la profesional.

Beca y clases

Estela cuenta que la beca "Estela Lara Salazar" es en honor a su madre que falleció en 2010. "Ella estudió en el Liceo de Niñas y fue una persona que siempre nos dijo, al igual que mi padre, que estudiar era lo más importante. Somos tres hermanas, las tres profesionales y eso es muy importante para nosotras. Nos dijo que el estudio era lo más importante para que llegásemos a ser mujeres que pudieran desenvolverse en la vida. Fueron unos padres de mucho sacrificio y realmente me hubiese gustado recibir en ese tiempo una beca como la que entrego, es de gran utilidad".

Estela recalca que el establecimiento es quien escoge al alumno que gana la beca. "El liceo lo selecciona, pero con las exigencias que puse, es decir, tiene que tener excelencia académica, promedio 6,7 mínimo y lo más importante es que quede en una universidad tradicional, ese es mi objetivo: aumentar el porcentaje de alumnos de liceos en universidades tradicionales, ese es mi sueño", dice la académica.

Asimismo, menciona que "no porque estudien en un liceo municipal no van a ser excelentes profesionales. A veces los niños creen que porque tienen problemas con su familia o por la misma vulnerabilidad no van a poder lograrlo, pero tienen que saber que también pueden llegar lejos porque los estudios son lo más importante para poder superarse; les va a dar otro enfoque, van a poder ser profesionales exitosos, sin olvidar dónde se formaron. Sueño que aunque sea uno de ellos ingrese a la universidad, sería un gran orgullo, como las tres estudiantes que quedaron este año en la UA, una de ellas en la carrera de medicina, eso es súper importante".

Finalmente Estela dice que le gustaría que otros colegas asuman el desafío de realizar un compromiso por el cambio social e integración.

"El primer paso es el Liceo Marta Narea Díaz, pero también puede existir un cambio en estudiantes de otros liceos", indica.