Redacción - La Estrella

Todavía está en el recuerdo de la comunidad calameña el asesinato de dos pequeños hermanos a manos de su madre.

Teresa Colque en un arranque inexplicable de ira, los degolló al interior del hogar que compartía la noche del crimen junto a su pareja.

Fue una discusión de pareja la que inició lo que sería una verdadera pesadilla para esta familia de ciudadanos bolivianos.

Ese día el matrimonio decidió dormir separado. Ella en el segundo nivel con sus hijos, mientras que su marido lo hizo en la planta baja.

El no escuchó nada, no hubo nada que le permitiera reaccionar a tiempo y salvar a sus pequeños.

Su mujer llevó a cabo un macabro plana. Con cuchillo domésticos degolló a sus dos pequeños y luego atentó contra su propia vida.

Desde ese día han pasado cerca de 20 meses, hasta que finalmente la justicia se pronunció.

Fue encontrado culpable de este doble parricidio y condenada a cumplir una pena de 17 años de presido mayor en su grado máximo.

"La imputada presentó lo que se denomina un estado crepuscular al momento de los hechos y en ese sentido el Tribunal habiendo reconocido ese eximente incompleta, así se denomina, está facultada para bajar en uno, dos o tres grados. En este caso la bajó en un grado, que es el mínimo", explicó el fiscal Ricardo Rivera.

Efectivamente se descartó un estado mental alterado que permitiera su inimputabilidad, sin embargo se estableció que atravesó al momento del parricidio por un estado sicológico alterado.

Durante el juicio la mujer atravesó por diversos estados emocionales, hubo episodios de llanto, pero el mayor transcurrir fue de plena tranquilidad. Su esposo solo se presentó el día en que debió prestar declaración.

Se encontraba cumpliendo con sus labores como guardia de seguridad cuando se percató que desde la empresa salía un delincuente.

En ese momento intentó impedir su huida, sin embargo éste logró escapar con una carretilla cargada de especies.

El guardia de 75 años se comunicó con personal de Carabineros a fin de denunciar los hechos, esto sin dejar de seguir al ladrón.

Al llegar los efectivos, el sujeto abandonó la carretilla y tomó solo algunas especies para luego huir corriendo por los pasajes de Puerto Seco.

Finalmente los uniformados consiguieron darle alcance recuperando las especies que había conseguido robar.

En total y según el avaluó que se realizó fueron en total cerca de seis millones de pesos en diversos productos.

El sujeto tiene 31 años y un amplio prontuario policial. Ingresó vulnerando el acceso principal y luego entró a un container desde donde sacó las especies.

Se concretó su captura por el delito de robo en lugar no habitado. Quedó a la espera de enfrentar cargos en su control y posterior formalización.

Tuvieron una discusión sentimental y terminaron a golpes. Es lo que ocurrió en una vivienda en calle Vargas, donde una mujer de 27 años agredió a su pareja.

Le advirtió que se iría del hogar y la detenida reaccionó de mala forma y la comenzó a atacar con golpes.

La víctima intentó defenderse, sin embargo en ese momento la imputada tomó una tijera y amenazó con quitarse la vida.

Quiso evitar esta acción y recibió un corta en una de sus manos. Luego la agresora comenzó a realizar maniobras de asfixia.

Finalmente la víctima pudo escapar de las garras de su agresora y pedir ayuda personal de Carabineros que de forma rauda llegaron a la vivienda y pudieron escuchar el relato de lo sucedido.

Al verificar la denuncia, procedieron a la detención de la mujer de 27 años por violencia intra familiar.

La víctima concurrió a constatar lesiones, pudiendo establecer el personal médico a cargo de su atención que había sufrido lesiones de carácter leve luego de los cortes con la tijera.