Redacción - La Estrella de Antofagasta
Apuñalado y lanzado al mar. Así fue el cruento final de la vida de un joven colombiano de 20 años, cuyos restos fueron hallados la mañana del domingo flotando en el mar al sur del puerto de Antofagasta.
Luego de tres días de herméticas diligencias la Fiscalía y la Brigada de Homicidios (BH) de la PDI entregaron ayer de manera oficial nuevos antecedentes respecto al hecho, que preliminarmente fue investigado como hallazgo de cadáver.
Con el correr de los días, y contando ya con avances en parte de lo que hoy es un complejo puzzle policial, el fiscal a cargo de la causa, Juan Castro Bekios, y el subjefe de la BH, comisario Luis Galaz Valdenegro, confirmaron que ya se investiga como homicidio. Ello, ya que pese a que aún restan importantes pericias y pesquisas, fue posible confirmar de manera científica la intervención de terceros, como también la identidad de la víctima.
Esta última, conseguida por peritos en huellas del Laboratorio de Criminalística (Lacrim), no fue revelada según Castro por petición de la familia, que está siendo atendida por la Unidad Regional de Atención a Víctimas y Testigos (URAVIT) del Ministerio Público.
"Respecto de la causa de muerte, de lo que se puede señalar hasta ahora es que obedecería a herida cortopunzante en la zona torácica y cuello", afirmó el persecutor, agregando que fueron observadas varias lesiones, pero mientras no se cuente con el informe final de la autopsia, no puede precisar el número de éstas.
El cuerpo sigue siendo periciado en el Servicio Médico Legal (SML) y continúan tomándose diversas muestras para ser enviadas a exámenes de patología y, a partir de dichos resultados, "precisar lesiones, causa y vitalidad de las mismas". El fiscal añadió que aún no hay una data de muerte, también pendiente y que deberá indicarla el SML. Sin embargo, la información obtenida con la familia del joven da cuenta que éste fue visto por última vez la semana pasada.
Ello explica que no hayan presentado una denuncia por presunta desgracia y guarda relación también con la apreciación referida a que el cuerpo estuvo un par de días en el agua. El cadáver tenía las piernas cercenadas, pero el fiscal indicó que "por ahora no es posible determinar con certeza cuál fue el mecanismo de acción que (lo) provocó".
Galaz, en tanto, calificó la identificación como un "avance tremendo" para continuar las diligencias, reconociendo ambos que se estaría frente a un crimen de características violentas no habituales.