La propietaria de una peluquería ubicada en el sector norte de la ciudad, al comenzar su jornada laboral se encontró con una sorpresa nada de agradable.

El día antes, luego de concluir con todas sus labores, se retiró del lugar, dejó todo cerrado y tomando las medidas de seguridad que adopta a diario para evitar ser víctima de la delincuencia.

Sin embargo, nada de eso fue suficiente. Cuando iba a comenzar la atención a público para recibir a sus clientas, se percató que el local se encontraba en total desorden, signo claro de robo.

Efectivamente, durante la noche desconocidos ingresaron a su local y se llevaron una gran cantidad de productos.

Tijeras, máquinas de cortar cabello, secadores, planchas, computadores, equipos musicales e incluso algo de dinero en efectivo. Según el avaluó realizado por la víctima, en total cerca de tres millones de pesos en pérdidas.

El lugar no cuenta con cámaras de seguridad que pudieran haber registrado los hechos y tampoco con otras medidas de seguridad. Carabineros adoptó el procedimiento y entregó la información a Fiscalía.

Se trata de una empresa instalada en plena carretera y que trabaja con equipos específicos utilizados en telecomunicaciones.

Por eso se sospecha que los ladrones tenían claro qué había en las oficinas y que fueron directo en busca de estos equipos.

Los hechos se registraron en la ruta que conecta la ciudad de Calama con San Pedro de Atacama.

El administrador de una conocida empresa de telecomunicaciones fue alertado de que había movimiento inusual en el sector, por lo que de inmediato fue a verificar qué estaba ocurriendo.

Una vez en las oficinas pudo confirmar que desconocidos habían ingresado tras descerrajar los accesos al lugar.

Ya en el interior, se dieron el tiempo de conseguir un cuantioso botín, reuniendo todos los equipos de mayor valor, que son comercializados solo para empresa especializadas en este rubro.

En total fueron alrededor de 10 millones de pesos en especies que consiguieron los delincuentes. El lugar no cuenta con cámaras de seguridad y no existen seguro comprometidos.

Redacción - La Estrella

Su esposo la pasaría a recoger a la casa y ella decidió esperarlo en el exterior a fin de agilizar el proceso cuando apareciera en su vehículo.

Esto en plena avenida Granaderos, una de las arterias con mayor tránsito de la ciudad. Eran pasadas las diez de la noche.

No era primera vez que realizaban esa operación para salir de paseo o para realizar trámites fuera de casa.

Pero esta vez fue diferente. Ella de forma sorpresiva vio cómo un sujeto se acercaba lentamente hacia ella.

No lograba ver su rostro, porque lo mantenía cubierto con una capucha. Hasta que llegó a su lado y la abordó.

El sujeto extrajo de entre sus vestimentas un arma blanca tipo cuchillo con la que la intimidó, esto a fin de evitar que ella pidiera auxilio.

Quedó paralizada. Fue incapaz de reaccionar y sabía que en caso de realizar cualquier movimiento, podía causar la molestia del delincuente.

Optó por acceder a cada una de las peticiones del antisocial, quien le exigió hacer entrega de todas sus pertenencias de mayor valor. No tuvo más opción. Le entregó cartera, celular y también un computador portátil.

Cuando había concretado su objetivo, el sujeto le pidió que no saliera tras él y luego se retiró del lugar por las calles cercanas.

La mujer alertó a personal de Carabineros de lo ocurrido, sin embargo pese a los patrullajes, fue imposible dar con el paradero del antisocial.