Cartas
Huelga y legislación laboral
Si bien la reforma impide que éstas reemplacen al personal en paro, quienes lideran las empresas pueden tomar decisiones para mantener su funcionamiento. Una manera eficiente de evitar la interrupción de cualquier actividad radica en su externalización a través de contratos de servicios con terceros. No podemos evitar que los trabajadores de una empresa mandante manifiesten su descontento frente a su empleador ante un proceso de negociación reglado, pero en una actividad externalizada con un tercero en que sus trabajadores comienzan una huelga si es posible de reemplazar los servicios por otra empresa. En los casos de actividades críticas que afectan la continuidad del negocio incluso se recomienda tener las actividades externalizadas con más de una empresa contratista, permitiendo efectuar una rápida reposición de las actividades, evitando así la interrupción de las prestaciones. Lo importante es considerar que externalizar trae consigo riesgos que se han de evaluar y que se pueden mitigar mediante el correcto control de los contratos. El mejor consejo para evitar pérdidas y paralizaciones de los servicios es que las compañías cuenten con estrategia que considere un posible escenario de huelga.