El costo de cerrar los ojos

La vida es complicada y a medida que va desarrollándose, a veces, se vuelve incluso más difícil. Hay personas que por distintas razones cierran los ojos ante las situaciones difíciles, tanto en el ámbito personal como profesional.

Sin embargo, la vida como complicada y difícil que ciertamente es, también es hermosa y con sus infinitas metáforas nos muestra cómo vivirla, solo es cuestión de saber captar el mensaje. Es sorprendente cómo luego de una extenuante escalada a una imponente montaña como el Everest, donde incluso ves a la muerte a los ojos, al llegar a los 8.000 metros de altura sientes esa paz espiritual inexplicable al ver ese maravilloso paisaje que se esconde luego de tanto esfuerzo. De la misma manera hay que ver las situaciones complejas y negativas de la vida.

Claro está, se oye muy fácil decirlo, pero ciertamente si lo pensamos, aplicarlo es cuestión de voluntad y actitud. Se sabe que a nadie le gusta escuchar las verdades fuertes, les incomoda o simplemente ignoran esos puntos negativos, pero es un gigantesco error, la vida viene con blancos, negros y grises, hay que aprender de cada uno de esos tonos y modificarlos para convertirlos en bondades.

Los costos de la hipersexualización

Señor director:

Cuando vemos en las noticias, dos días continuos, que menores de edad son presuntos responsables de violaciones, no podemos dejar de impactarnos.

Primero una mujer de 38 años violada por dos menores de 17 años en promedio y luego una niña de ocho, violada por otros tres niños.

Aquí definitivamente hay algo que no estamos haciendo bien en casa y también como sociedad, siendo hora de corregir para que esto no vaya en alza.

Tenemos a niños en edades tempranas hipersexualizados. Es así como podemos ver a padres que normalizan e incluso incentivan que niños de jardín infantil se den besos y hablen entre ellos como pololos. Potenciamos que a nuestros hijos les guste mirar traseros o los escotes de las mujeres como algo normal.

Si bien es normal que los niños vayan sintiendo cosas, esto debe ser respetando procesos y siempre en marco del respeto, haciendo entender que las expresiones de afecto deben ser porque el otro también quiere.

La hipersexualización nos puede llevar no solo a tener potenciales abusadores, sino también niños abusados que normalicen hechos que no pueden ser permitidos. A no descuidarnos padres.

Daniel Valenzuela