Primavera en Ayquina
Señor director:
Septiembre, como nos gusta este mes donde llega la primavera, nos trae alegría, muchos recuerdos, trinar de pájaros, fiestas y fragancia floreal.
Las bandas de bronce de Calama despidieron a los que viajan a Ayquina. Desde Toconce San Santiago fue a acompañar a la Virgen. En Ayquina se escuchan muchas voces y trajes coloridos de promesantes participando en la "Bendición de la Luz", con fogatas quemando el pasado y esperando un mejor futuro.
Algunos fieles no llegaran a las Vísperas del 8, pero todos estarán presentes en la Santa Misa en la plaza y en la procesión.
Todavía muchos promesantes llegan caminando, siguiendo las rutas de Puente del Diablo o el Sifón donde se oye el zumbido del sol durante el día y el inmenso frío en la noche, guiados por las estrellas, calentándose con fogatas, café y sopaipillas en Chiu Chiu.
Las cuatro generaciones de familias que viajamos antes arriba de los camiones al amanecer, los hemos reemplazado por buses y autos. Aun recodaremos cuando la gente del pueblo corría apenas las cortinas de sus ventanas, desconfiando de los visitantes.
Las casas entonces eran de barro con techos de totora. Usábamos velas y lámparas de carburo, llevábamos comida, camas y petacas.
En algunos años hacía mucho frío y caía granizo en las fogatas donde calentábamos la leche.
Siempre asistían muchos bailes chuquicamatinos, calameños y de pueblos cercanos. Recuerdo a los hombres recios que trabajaban construyendo la cañería de agua de Toconce.
¡Oh! Nunca olvidaré a los pastorcitos que venían bajando por las quebradas con sus llamitos, tocando quenas y tambores.
Eran otros tiempos, pero seguiremos horneando el pan en los hornos de barro y bajaremos a refrescarnos, descansar, y recordar al río.
Debemos agradecer a las familias y directivos la Comunidad Ayquina Turi por mantener la tradición, devoción y proveer en esta fiesta luz, agua, salud, recolección de basuras y seguridad en el camino.
Nancy Monterrey