Recuerdan a 26 ejecutados y detenidos desaparecidos víctimas de la Caravana
La Caravana de la Muerte, liderada por Sergio Arellano Stark, llegó a Calama el viernes 19 de octubre de 1973 para detener entre las 15 y las 18 horas a 26 personas que, tras un supuesto consejo de guerra, fueron fusiladas y dejadas camino a San Pedro de Atacama, donde hoy se erige el Parque Para la Preservación de la Memoria Histórica.
"Fusilaron a 26 hombres, hijos, padres, esposos, y le quitaron la vida no tan solo a ellos sino que también a sus familias", relató durante el acto realizado en el frontis del edificio de Codelco, la presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados y Detenidos Desaparecidos Políticos de Calama (Afeddep), Violeta Berríos, a 45 años de los hechos.
"Muchos los han olvidado, pero mientras estemos nosotros y estén ustedes aquí acompañándonos, ellos se mantienen vivos. Nosotros tenemos el recuerdo presente y no lo tenemos solamente el 19 de octubre, lo tenemos todos los días del año. Ojalá Dios nos dé fuerzas para seguir luchando y ver una pequeña justicia en Chile", agregó la dirigente que perdió a su marido Mario Argüelles, asesinado a los 34 años de edad.
"Quiero expresar mi más profunda admiración por estas mujeres que por 45 años de sus vidas han buscado verdad y justicia, luchando por encontrar a sus seres queridos que por el solo hecho de querer un Chile mejor, fueron objeto de persecuciones, torturas y muertes que marcaron la historia de nuestro país", expresó por su parte y en representación de los trabajadores y supervisores de Chuquicamata, la presidenta del sindicato N°1, Cecilia González. "Son madres, hijas e hijos que al pasar de los años han demostrado al mundo que la esperanza es lo último que se pierde y que a pesar de las dificultades que han encontrado, no han escatimado esfuerzo alguno en encontrar la verdad de una represión despiadada, planificada y dirigida por el Estado para eliminar todo tipo de oposición que se interpusiera", agregó la dirigente.