Contraportada

Estefani Carrasco Rivera.

A más de 50 días de protestas y movilizaciones en todo el país debido a las injusticias, falta de oportunidades, privatización de servicios básicos y crecimiento del endeudamiento como reflejos del sistema económico imperante, eventos masivos como el Carnaval Andino con la Fuerza del Sol estaban en cuestionamiento de hacerse o no.

Tras la última reunión de la mesa organizadora del Carnaval, compuesta por la Federación de la Cultura y las Artes Indígenas Kimsa Suyu, la Confraternidad de Bailes Andinos Inti Ch'ampi y la Municipalidad de Arica, acordaron realizar el carnaval en sus fechas previstas del 7, 8 y 9 de febrero, pero, además, darle un sentido social.

Cabildos

Esta semana se realizarán reuniones entre las directivas de la Federación y la Confraternidad con sus bases para dialogar entorno al sentido del carnaval, pasando por temas que incluye la entrega de los premios.

Sobre esto el alcalde de Arica, Gerardo Espíndola manifestó que el carnaval también es una expresión política y se propiciará la participación de la comunidad en el diseño de este año.

"Nos reunimos con las agrupaciones del Carnaval para iniciar un proceso participativo con la comunidad, especialmente con quienes bailan, para la construcción y diseño de un Carnaval que tenga sentido social por lo que está pasando hoy. El Carnaval no deja de ser siempre una expresión cultural y política de reivindicación de nuestros pueblos", dijo Espíndola.

El presidente de la federación, Javier Domínguez agregó que este año no se realizarán fiestas que antes se hacían como la cena de las ñustas.

Las actividades que irán son solo el Convite (1 de febrero) y la Pawa (6 de febrero).

"Vamos a conversar sobre el contexto de los pueblos indígenas en relación a la nueva constitución y la representatividad. Los pueblos originarios forman parte de la historia de Chile y también tienen algo que decir sobre las repercusiones que pasaron cuando se trató de suprimir la lengua aymara, por ejemplo", manifestó Domínguez.

Martín Montecinos, presidente de la Confraternidad, comentó que organizarán un conversatorio para saber qué propuestas entregaran al proceso social, "pero el Carnaval tiene que hacerse, es el espacio para que todo el año comerciantes, bailarines ariqueños disfruten de esta fiesta cultural, que es parte de nuestra esencia".

Competencia y premios

Uno de los temas que se abordará entre las bases esta semana, es si se entregarán premios en dinero a las 63 comparsas que se presentan.

"Eso está en estudio este año, podría ser solamente un carnaval representativo, pero eso lo tenemos que resolver con las bases, no podemos tomar esta atribución. Las bases van a decidir si habrá competencia y premios".

No consignas políticas

Al consultar si los bailarines podrán expresar su opinión mientras pasan por el recorrido Javier Domínguez manifestó que el proselitismo político no está permitido en las normativas del carnaval.

"Dentro de las bases del carnaval dice que no podemos hacer ningún tipo de proselitismo político, está estrictamente prohibido y cuesta la expulsión del Carnaval. Quizás lo único permitido sería sobre temas medioambientales".

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