Crisis social está afectando deseo de permanencia de inmigrantes
Encuesta mostró una baja en las expectativas, aunque el grueso se declara feliz en el país.
Redacción
El estallido social ocurrido el 18 de octubre en el país también tuvo un impacto en las expectativas de la población migrante, con aristas que van desde su experiencia en Chile hasta el plano laboral.
El Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) y la agencia de investigación Ekhos desarrollaron el estudio "Encuesta Voces Migrantes 2019", la que tuvo dos momentos: antes y después de la crisis social.
Los resultados mostraron cambios notables entre ambos periodos. Por ejemplo, la herramienta, aplicada a casi 500 extranjeros, registró una disminución del 10% en el ánimo de permanencia en el país en caso de perder el trabajo.
Antes del estallido, el 75,9% de los inmigrantes aseguraba que se quedaría en el país, pese a no tener empleo, lo que bajó al 65,5% tras las primeras semanas de movilizaciones.
Además, de 7,5% a un 9,8% aumentó la cifra de quienes se cambiarían de ciudad y del 7% al 10% el número de quienes regresarían a su país.
Y es que el factor laboral es el más sensible para este grupo. Según el mismo estudio, el 31,8% migró a Chile por posibilidades de empleo, el 31,5% porque tenía un conocido o familiar acá y el 11,9 por la tranquilidad y seguridad del país.
Sobre las ocupaciones de los inmigrantes, el 22,9% labora en el rubro servicios y como vendedores, y el 17,8% son trabajadores no calificados (los porcentajes más altos por tipo de ocupación).
Análisis
El encargado regional de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Víctor Flores, explicó que en el caso de Antofagasta, la migración es esencialmente laboral.
"Un indicador de las decisiones de estas personas tiene que ver con los efectos que tenga esto (estallido social) en el mediano plazo en el mercado del trabajo", dijo.
La región cuenta con 88 mil migrantes y Antofagasta es la segunda comuna del país que concentra la mayor cifra.
Según el estudio "Mujeres Migrantes" de la Asociación Chilena de Municipalidades (julio del 2019), en la región el 56% y el 79%, de las mujeres y hombres respectivamente, trabajan como empleados.
"En Antofagasta el mayor número de migrantes está concentrado en el comercio y servicios, que a su vez tiene el mayor impacto de esta crisis, lo que podría incidir en las expectativas de permanecer en la región", apuntó Flores.
Las decisiones de estas familias, continuó, no necesariamente pasan por abandonar el país, sino que también podrían considerar radicarse en otras ciudades con mejores expectativas.
Flores manifiesta que un aspecto son las percepciones que tienen los migrantes en una situación de crisis. Pero si el lugar sigue ofreciendo posibilidades laborales, este último dato pasa a ser más importante para la permanencia.
El encargado regional de la OIM se refiere a efectos en el mediano plazo si la situación económica no deja atrás la incertidumbre. El Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) de octubre, cuando estalló la crisis, anotó un descenso de 3,4% en comparación al 2018 y todavía faltan los resultados de las semanas siguientes.
La encuesta del SJM recoge algunas de estas impresiones.
Antes de la crisis, un 23% destacaba positivamente la situación económica del país, lo que bajó al 18%. También se redujo el porcentaje de quienes se quedarían a vivir para siempre en Chile, de un 44% a 35%.
A esto se agrega que en una escala de 1 a 10, donde 1 es nada y 10 es mucho, el nivel de felicidad que declaran los inmigrantes en el país bajó de 8 a 7,5 desde que estalló la crisis.
"Finalmente, se observa que un 40% de las personas consultadas quiere nacionalizarse chilena, incluso sabiendo que perderá su nacionalidad de origen", destacan.