Ausentismo escolar provoca serios trastornos en las familias
Casos de violencia intrafamiliar y el no pago de pensiones alimenticias han aumentado un 20% por el ausentismo de los estudiantes.
Redacción
Una grave crisis familiar está ocasionando el ausentismo escolar derivado de las protestas tras el estallido social, provocando alteraciones en la rutina diaria en los hogares calameños, la que desencadena en estrés, conflictos e incluso agresiones.
El Juzgado de Familia de Calama, ha visto que en este tiempo han aumentado las causas de violencia intrafamiliar y al revisar su origen, todas tendrían que ver con la suspensión de clases.
"Esto ha ocasionado serios trastornos, debido al ausentismo escolar vivido el 2019, aumentaron las causas de violencia intrafamiliar, las problemáticas familiares y todas justamente porque los niños no están en el colegio. La situación es compleja", explicó el juez titular del Juzgado de Familia de Calama, Jorge Saavedra.
Causas
Según explicaron desde este juzgado, el que los menores no vayan a clases, altera el ritmo de vida de muchas familias, donde ambos padres trabajan o trabaja la madre y no tiene donde dejar a sus hijos. Esto ha provocado más problemas en los menores de enseñanza media, ya que son ellos los que requieren mayor cuidado.
"En primera instancia ocurre que existe un mayor gasto en algunos hogares, debido que algunos menores ya no están recibiendo su desayuno o almuerzo de la escuela. Luego los niños al no estar estudiando, empiezan a hacer otras actividades, lo que produce trastornos familiares. A veces los 2 papás tienen que trabajar y uno de ellos tiene que asumir el cuidado de los niños", agregó el magistrado.
Estos inconvenientes no habían sido considerados hasta el momento, pero este juzgado ha visto que estos problemas que causan estrés, han empezado a derivar en violencia. "Hay un aumento en causas de violencia intrafamiliar, en el no pago de pensiones alimenticias. Se podría decir que en un 20% han aumentado las causas derivadas de estos episodios. Hay una cantidad de alumnos que no participa en las marchas, pero tampoco pueden ir a estudiar, entonces están obligados a estar en casa, donde las familias deben costear la alimentación que antes recibían en la escuela. Estos problemas no se habían considerado hasta ahora que se están entendiendo como resultados negativos de la inasistencia escolar", agregó Saavedra.
Reunión directores
Hace unos días, el magistrado tuvo una reunión masiva con los directores, representantes de profesores, paradocentes y encargados de convivencia escolar, para hablar precisamente de las manifestaciones del estallido social. Donde además se tocó este punto importante.
"Nos dejaron en claro que las manifestaciones que ellos hagan, están dentro de los derechos que tienen y lo que tenemos que hacer es canalizar la forma de cómo lo están haciendo. Esto para que no perjudiquen a los alumnos que quieren estudiar y no quieren participar de estas manifestaciones", explicó Rosario Orellana, directora de educación de la Corporación Municipal de Desarrollo Social.
En esta reunión, se explicó que cada establecimiento debe otorgar este derecho a los alumnos, pero si existen hechos de violencia o destrozos, cada recinto tendrá que evaluar junto a los apoderados, como aplicar sanciones.
"Si ellos quieren, podrán tener un espacio dentro de los establecimientos para manifestarse, pero eso sí, para manifestarse", finalizó la representante de esta corporación municipal.
El juez Jorge Saavedra, manifestó que en ningún momento están contra las manifestaciones, pero que los alumnos entiendan, que hay compañeros que tienen problemas por esto. "No negar las marchas, pero sí les solicitamos que respeten las jornadas, el calendario escolar. En el 2019, fueron dos meses en que no asistieron a clases y de verdad que esto provocó varios trastornos familiares", explicó Saavedra.
Durante este año se han producido algunos problemas menores, pero la mayoría los alumnos se están manifestando al interior de sus establecimiento de modo pacífico.