Redacción - La Estrella del Loa
Un año se cumplió hoy, desde que el cuerpo de Héctor Henríquez de 47 años, fue encontrado completamente calcinado al interior de un vehículo en el interior de la ruta que une a Calama con María Elena. Si bien, la familia logró darle sagrada sepultura, después que este ingeniero estuvo desaparecido 6 meses, aún no conocen qué realmente le pasó. Incluso señalaron, que no le han entregado aún el resultado de la autopsia.
"No hay duda, que el reencontrarnos con Héctor fue un momento del cual hasta el día de hoy nos sitúa en una posición de 'afortunados', sabiendo la realidad de miles de familias que por años siguen dando su vida para tener noticias de sus seres queridos desaparecidos de manera involuntaria, y que no logran respuestas. Pero no podemos negar que la forma en que lo encontramos y el dimensionar la manera tan violenta en la que murió sigue siendo un dolor que está presente a diario. Ninguna familia en Chile merece vivir una experiencia como ésta y es por esto la frustración que tenemos frente a lo sucedido, y la decepción de las policías y fiscalía por negarse hacer su trabajo y conocer la verdad. Es una pena decirlo, pero a un año de su hallazgo, la única noticia recibida de quienes deberían apoyarnos con la investigación, es que el cuerpo encontrado calcinado pertenecía a mi hermano, ni siquiera la autopsia", explicó Javier Henríquez, hermanos de Héctor.
Pericias
Esta familia, insistió que hasta el momento tienen dudas que no los deja descansar. "Insistir en temas tan básicos como pericias al interior de su casa (supuestamente último lugar donde fue visto con vida por última vez), revisión en tiempo de las pocas cámaras de seguridad que existen en la zona, chequeo de los movimientos bancarios, son acciones que uno desde la inexperiencia esperaría poder resolver en el corto plazo. Pero ni siquiera este tipo de gestiones fue llevada adelante con la celeridad que significó la desaparición de Héctor, y donde el esfuerzo siempre estuvo del lado de su familia y amigos, recorriendo extensas zonas para poder dar con su cuerpo, ya que el tiempo nos dio la razón. Nosotros buscamos un cuerpo, mientras los entes responsables de la investigación nos repetían de manera majadera que Héctor había evadido, sin entender hasta hoy, la facilidad para defender una línea en la investigación que al parecer resultaba más cómoda, simple y lo peor, carente de cualquier prueba tangible de la cual sostenerse", indicó Javier.
La investigación continúa abierta y a más de un año, que vieron por última vez a Héctor, la familia quiere conocer la verdad.