Jorge Reyes Patuelli

Representantes del Banco Estado presentaron una querella contra quienes resulten responsables del supuesto ciberataque sufrido el fin de semana, que obligó ayer a mantener cerradas casi todas sus sucursales del país. Según los ejecutivos, esto no afectó los dineros de sus clientes.

"Es un virus, un malware, que encripta la información. Hemos resuelto esto no haciendo operativas estas máquinas infectadas", dijo el presidente del Banco Estado, Sebastián Sichel, sobre lo que incapacitó la operación de las cajas de las sucursales.

"Reaccionamos lo más rápido posible y bajamos los sistemas, lo que permitió que no se afectaran los fondos de los 13 millones de personas que son clientes", agregó.

El banco presentó una querella por sabotaje informático y la Fiscalía Metropolitana Centro Norte ordenó a la Brigada del Cibercrimen de la PDI iniciar las pesquisas.

El supuesto ataque impidió la apertura de más de 400 sucursales. En Santiago se mantuvieron funcionando las de calles Huérfanos y Bandera, lo que provocó largas filas en el centro de la capital.

Mientras el problema se resuelve, el banco pidió utilizar las Caja Vecina y las opciones digitales de la institución, como el sitio web y app, que, aseguran, no fue afectada por el virus y su funcionamiento era seguro.

Su gerente general, Juan Cooper, dijo que el malware ya está controlado y que están limpiando los aproximadamente 12 mil computadores que infectó. Añadió que esperan reabrir la totalidad de las sucursales "a mediados de esta semana", o sea, mañana.

El ministro del Interior, Víctor Pérez, afirmó que este ha sido el peor ataque de este tipo sufrido por el sistema bancario y su par de Hacienda, Ignacio Briones, explicó que afectó también las transacciones y los pagos que realiza el Estado.

El presidente de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), Joaquín Cortés, instruyó en la tarde a todos los bancos para que revisen sus infraestructuras tecnológicas y críticas para evitar sufrir situaciones similares.

Consternadas amanecieron ayer las cerca de 50 personas que habitan un campamento gitano ubicado cerca de la estación Sargento Aldea de Villa Alemana, en la Región de Valparaíso, quienes a poco de iniciar el día se enteraron de la muerte de una joven al interior de una de las carpas por causas que se desconocen.

La mujer, de 28 años, fue vista con lesiones en su rostro y quienes residen en el lugar afirman que la noche anterior habrían oído una pelea en el lugar.

Las primeras diligencias de la Fiscalía apuntan a que aquella pelea podría estar vinculada a denuncias de violencia intrafamiliar que la víctima ha hecho contra su conviviente, quien a las pocas horas del deceso fue arrestado por su posible participación y enfrentaría hoy su control de detención.

"Hay una historia de agresiones por parte de este sujeto a la víctima", señaló el fiscal César Astudillo, dando cuenta que existen dos causas, una de 2018 y otra del 2019, que están terminadas sin haber decretado alguna medida cautelar en favor de la mujer.

Ayer la PDI llegó al lugar para realizar las pericias en el sitio del suceso que permitan confirmar o descartar la teoría del femicidio, proceso para lo cual será "determinante" los resultados que arroje la autopsia que el Servicio Médico Legal realiza al cuerpo para dar con la causa precisa de muerte. "No obstante ello, los antecedentes que ya existen nos permiten preliminarmente vincular el hecho con el conviviente", enfatizó el fisacl Astudillo.

Los miembros de la comunidad lamentaron la muerte de su paisana y aseguraron que los hechos de violencia nunca pararon "Los golpes eran reiterados", aseguró uno de ellos.

La Policía de Investigaciones (PDI), indaga una agresión ocurrida al amanecer del domingo en un pasaje de La Florida, donde un hombre golpeó a una mujer.

Los hechos quedaron grabados por al menos cuatro cámaras ubicadas en viviendas y por vecinos de los pasajes Los Hornos y La Llanura.

Los residentes fueron despertados a las 07.50 por los gritos. Los registros muestran a una mujer caminando y a un hombre que la persigue. Cuando la alcanzó, la tomó del pelo, arrastró, le dio puñetazos, patadas y la amenazó con un palo.

Una residente contó que hasta abrió l ventana de su casa para pedirle que parara y que viera que lo estaban mirando para denunciarlo. Tras ello la víctima y el agresor se marcharon.

El hecho está siendo pesquisado por la fiscalía local de La Florida y el subprefecto de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de la PDI, Rodrigo Almazábal, pidió a quienes conozcan a los involucrados lo informen. El individuo usaba polerón con gorro y mascarilla, lo que dificulta su identificación.

La ministra de la Mujer y Equidad de Género lamentó el hecho. "Esto no es sostenible, no puede ser que cada noche tengamos una o dos denuncias de violencia (...) y esos son los casos que sabemos", dijo Mónica Zalaquett.