No le fue bien a Cobreloa y las cifras lo indican. Terminó en el puesto 11° de la tabla general, con un 38% de rendimiento que se resume en 14 partidos jugados, de los cuales ganó cuatro, empató otros cuatro y perdió seis. Marco Antonio Figueroa consiguió un rendimiento general de 40% pese a que armó un plantel nuevo donde el objetivo era pelear directamente por el ascenso directo. Nelson Soto, que llegó a hacerse cago por cuatro partidos consiguió el 33,3% aunque generó un mejor ambiente.

Más allá de las innegables diferencias que se produjeron entre el ex DT, Marco Antonio Figueroa y la directiva naranja, antes y después de la pandemia -con enfrentamientos públicos y poniendo al club en la noticia por división interna entre cuerpo técnico y la regencia de la institución-, lo que terminó por provocar su salida fueron los resultados. MAF perdió tres partidos seguidos en Calama, ante Magallanes, Santa Cruz y San Felipe. Como local, Cobreloa sólo obtuvo el 38.8% de los puntos.

Los dos jugadores que llegaron en diciembre del año pasado y estuvieron en los 1.260 minutos del equipo en la primera rueda fueron el argentino Maximiliano Velazco y el defensor uruguayo Emiliano García, quienes pasan la evaluación de la comisión de fútbol pese a que tampoco escaparon de la crítica.

Hay otros que tuvieron el denominado "peso de la campaña" fueron futbolistas como Gabriel Tellas -que se lesionó-, Kilian Delgado, Pablo Caballero y Axl Ríos.

Dos jugadores llegaron con el cartel de ser la columna vertebral del equipo y terminaron decepcionando a los hinchas y al medio en general. El delantero Hernán Hechalar y el mediocampista -con nacionalidad chilena- Ricardo Rosales no convencieron y tuvieron poca regularidad, ausencia por lesiones y nunca encontraron su lugar en el equipo. La situación del volante uruguayo Pablo Caballero es distinta pues es el capitán minero, aunque su aprobación hoy está dividida.

Proyectar jugadores es una de las grandes búsquedas en los clubes de fútbol, aunque en el caso de Cobreloa, siempre ha estado supeditada al trabajo de la rama cadetes en la capital. 1260 minutos consiguió el elenco naranja en esta primera rueda en el denominado requisito de la "Regla sub 21", donde Axl Ríos y Claudio Miranda sumaron más tiempo en cancha. La irrupción de Bryan Ogaz en la parte final de la primera rueda y la confirmación de Pablo Brito como jugador de proyección habla de futbolistas de proyección en el corto plazo.

Poco antes de la liguilla se hablaba de una planilla de 120 millones de pesos por parte de la directiva del club. Es decir, la apuesta más alta para la categoría y que tuvo su primera decepción en el mini torneo en Santiago donde Cobreloa fue eliminado en el primer partido. ¿Se eligió mal? Sí, porque cuando el torneo ya estaba en marcha, futbolistas como Manuel Bravo, Ignacio Ibáñez, Lucas Triviño y Víctor Cisterna aparecieron incrementando un plantel y sin sumar muchos minutos en la primera rueda.

Más allá de las irrupciones de los juveniles con proyección, Cobreloa contó con algunos futbolistas que sin ser brillantes en sus números igual aportaron a maquillar en algo la mala campaña. Los valdivianos Jaime Soto y Kilian Delgado fueron figuras en varios partidos del equipo y armaron una interesante dupla que funcionó tanto con Marco Antonio Figueroa como con Nelson Soto en la banca. En el caso de los goleadores, Gabriel Tellas confirmó su cartel hasta su lesión y es el artillero con cuatro tantos. Roberto Riveros aportó con tres.

Una cosa es el argumento que después de cinco meses de para, el físico se resiente y será normal tener lesiones, como se ha visto en todas las ligas del mundo. Pero en Cobreloa existen cifras negativas al respecto antes y después del receso. Los que se han perdido partidos este semestre son Josepablo Monreal, Hernán Hechalar, Jaime Soto, Juan Pablo Andrade, Manuel Bravo, Matías Fernández, Ricardo Rosales, Ignacio Ibáñez, Claudio Jopia, Kevin Mundaca, Gabriel Tellas, Eric Ahumada y Pablo Brito. Mucho, si se compara con otros planteles de la B.