asistencial regional, que se estima en un 85% en paralelo con el incremento sostenido de internados por coronavirus y también un personal clínico con más experiencia, pero a la vez mucho más agotado que la primera ola.

Con ello, el lunes se evidenció este nuevo momento crítico por el que está pasando Antofagasta y que no se veía desde junio-julio: el Hospital Regional anunciaba que se había quedado sin camas de cuidados intensivos e intermedios (UCI y UTI), por lo que se inició el traslado de pacientes a la Región Metropolitana, sumando seis de estos procedimientos recientemente y totalizando 60 si se considera toda la pandemia.

Mientras tanto, continúa el trabajo en la estrategia de apertura de camas. Ayer, por ejemplo, el HRA mantenía 72 de sus 75 camas críticas ocupadas, un 96%. Hay que recordar que antes de la pandemia esa cifra era de 30 y en el momento más álgido, a inicios de julio, llegó a las 105.

Reflexiones y desafíos

En estos 300 días el SARS-CoV-2 ha golpeado en distinta intensidad con alzas, bajas y un nuevo incremento de contagios. A ello se agregan los costos económicos personales y el deterioro de la salud mental producto del confinamiento.

De hecho, según cifras del HRA, hasta octubre se registró un aumento del 40% entre el 2020 y el 2019 en las atenciones del Consultorio de Salud Mental Central (Cosam), principalmente por estrés post traumático y del estado anímico de pacientes, a lo que suman síntomas de ansiedad, depresión y crisis de pánico, que en el mismo mes mostraron personas que se habían hospedado en residencias sanitarias y que han requerido de prestaciones psicológicas.

A modo de balance general la seremi de Salud, Rossana Díaz, señala que luego de casi un año de pandemia, "hay dos aristas. Lo bueno es que el personal aprendió cómo enfrentar esto y no estamos recibiendo algo nuevo. Cuando llegaron los primeros casos tratamos de hacer lo mejor, de poner todo nuestro esfuerzo, pero lógicamente estábamos aprendiendo al igual que el resto del mundo. No fue exclusivo aquí que no supiéramos el comportamiento del virus, así que creo que nos encontramos más preparados para enfrentar este aumento de contagios".

Sin embargo, la otra cara de la moneda es "que parece que no aprendimos nada y hablo de la comunidad. Se nos murieron personas, tenemos 588 fallecidos, es decir, 588 familias afectadas porque alguien falleció por Covid. En esta región, que no somos tantos, 588 familias es muchísimo y sin embargo, seguimos cerrando locales porque hay eventos al interior, seguimos cerrando camping que trabajan sin autorización sanitaria, seguimos recibiendo denuncias de fiestas..."

"Lamentablemente, como comunidad no hemos aprendido nada", sentencia Díaz.

De manera paralela, durante estos días el director del HRA, Enrique Bastías reafirmó con más fuerza que los esfuerzos para adecuar nuevas camas críticas continúa, pero que preocupa el desgaste al que estuvo expuesto el personal de salud, de quienes actualmente se estima que a nivel nacional el 25% de la dotación de los hospitales se encuentra con licencia o con vacaciones para su recuperación, estadística de la que es parte el principal recinto médico de la Macrozona Norte.

Por ello, los principales desafíos hoy se concentran en el enfrentamiento de la segunda ola y para lo cual no sólo se trabaja en la apertura de camas y el traslado de pacientes, sino que en la contratación de nuevos profesionales para apoyar las labores clínicas frente a esta baja de funcionarios por licencia y vacaciones, cuyo proceso progresivo de uso de sus feriados legales se inició en septiembre.

"Actualmente para reaperturar camas necesitamos al día de hoy mucho personal. Estamos solicitando y viendo la posibilidad de volver a contratar a algunos estudiantes que están terminando. Se necesitan aproximadamente 175 funcionarios al día de hoy, sin desmerecer que se pudiese requerir más si la necesidad nos lleva a abrir más camas críticas", señala doctora y subdirectora médica Servicio de Salud de Antofagasta (SSA), Yoselyn Castillo.

Finalmente, en otro de los pasos a seguir en esta nueva etapa de la pandemia es -frente a este incremento de pacientes críticos que entre diciembre y enero prácticamente se ha triplicado- es la vacunación del personal de UCI con la dosis Pzifer-Biontech, de los que en la región el número alcanza a los 400 entre el sistema público y privado de salud, cuya fecha aún no se ha revelado.

Pero mientras tanto, el llamado es el mismo que hace 300 días, la estrategia por excelencia para combatir el SARS-CoV-2: el autocuidado, el lavado de manos, el distanciamiento físico y el uso de mascarilla. Son 10 meses, casi un año, en el cual nuestra vida cambió radicalmente, pero la tarea sigue siendo de todos.

588 personas con Covid confirmado han fallecido en la región y casi 800 si se agregan los casos sospechosos.

25 mil 446 contagios acumula la región, según el último Informe Epidemiológico.

175 funcionarios de la salud se requieren contratar en la zona para enfrentar la segunda ola.

180% es el aumento de pacientes Covid-19 que en la región permanecen en la UCI.