Facilitadora del Servel encantó con su gracia en la Escuela D-7 de Tocopilla
Camila Araya Piñones le puso una cuota amena en la larga espera que tuvieron los votantes.
Pablo Mamani Prado
Camila Araya Piñones tiene 18 años de edad y ayer asumió una de las tareas más difíciles en esta elección, al tener mayor contacto con la gente: ser facilitadora del Servel.
Esto, porque ella era la encargada de recibir a los votantes en la entrada de la Escuela Carlos Condell D-7, donde les echaba alcohol gel y guiaba hacia donde tenían que dirigirse, tomando en cuenta que muchas personas estaban cortas de paciencia ante la larga fila que se formó en el recinto educacional, el cual debutó en estas elecciones en Tocopilla.
Buena Onda
Con su simpatía, buena onda y alguna palabrita de ánimo a los sufragantes, Camila pudo cambiar algunos de esos rostros largos ante la larga espera, siendo uno de los aspectos positivos que tuvo esta elección en el Puerto Salitrero.
"Creo que, por ejemplo, mucha gente se enoja por la aglomeración, pero hay que ponerle un poquito de alegría porque o sino es fome que te traten mal, hay que alegrar el ambiente. Soy así en todos lados, extrovertida, feliz, alegre", aseguró Camila, estudiante de primer año de la carrera Trabajo Social.
En la Escuela Carlos Condell, que antes no había sido sede de votación, se formó aglomeraciones desde el mediodía. Algunos votantes estaban un poco enojados por lo lento del proceso, pero el trabajo de Camila pudo ser un poco más ameno gracias a su simpatía y picardía.
pablo.mamani@estrellatocopilla.cl