Cartas
Exministros
Estimado director:
Considerando que nuestras señoras Juanitas son las que manejan el casi siempre escaso dinero en la mayoría de los hogares de Chile, para hacerlo durar hasta el fin de mes y prepararse para el próximo, o sea ellas serían ni más ni menos nuestras "Ministras de Hacienda", y por lo tanto tienen una opinión autorizada de la economía y finanzas domesticas (porque ellas están en la papa misma), e intuyen el futuro que se les vendrá, muy acertadamente, entonces será muy importante tomar en cuenta las posiciones de los 11 exministros de Hacienda de los últimos 30 años (porque ellos sí conocen y han estado en la papa misma de la hacienda pública) ante el plebiscito de salida:
-2 por el Apruebo (Marcel, Eyzaguirre).
-5 por el Rechazo (Briones, Velasco, Farfán, Aninat, Foxley).
-4 no se han manifestado (Cerda, Larraín, Valdés, Arenas).
"Mientras más se sepa, tanto mejor" (Anónimo).
Luis Enrique Soler Milla
Loteos
Señor director:
Luego de que el Ministerio de Agricultura anunciara medidas para regular las parcelaciones rurales, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) emitió un instructivo con 12 puntos que, en la práctica, hace casi imposible cualquier subdivisión rural en Chile, generando un congelamiento de facto.
Mucho se ha hablado de asegurar el abastecimiento de alimentos, del derecho de vivir en un ambiente libre de contaminación, de los polos de desarrollo urbano, pero ninguna autoridad se ha preocupado de la conservación de ecosistemas no intervenidos por el hombre. Con esto no hablo de "eco parcelas", sino de proyectos de parques privados de más de cinco hectáreas protegidos mediante Derecho Real de Conservación (DRC), un modelo de negocio que hace cinco años y con más de 2 mil hectáreas protegidas, hemos desarrollado.
No todos los predios son susceptibles de explotación agrícola, ganadera o forestal, también existen ecosistemas no protegidos por el Estado que los particulares deseamos cuidar. Dejar fuera de la nueva regulación este modelo de subdivisiones con DRC perpetuo, en lotes de sobre cinco hectáreas, implica entregar el cuidado de los espacios naturales solo a magnates y esperar que su filantropía se mantenga en el tiempo.
Felipe Escalona