Leo Riquelme

Colo Colo volvió ayer al triunfo a costa de Magallanes, al que venció por 2-0 en el Estadio Monumental, lo que le permite a su entrenador Gustavo Quinteros llegar más confiado al Superclásico del domingo ante la Universidad de Chile.

Los tantos llegaron a través de Fabián Castillo, quien a los 12 minutos aprovechó la primera jugada profunda del local. El colombiano capturó el rebote dejado por una lenta defensa carabelera, que no logró despejar un centro de Carlos Palacios.

La celebración del cafetero fue un desahogo para los 35 mil hinchas que llegaron a Pedrero, quienes no querían repetir la derrota del fin de semana pasado ante Coquimbo en casa.

En el primer tiempo la visita casi nunca logró aproximarse al arco albo y estaba asfixiado por la presión que ejercían los colocolinos en todas las zonas del campo, lo que le permitía tener una jornada tranquila a la debutante defensa local, formada por Ramiro González, Matías de los Santos, Daniel González y César Fuentes.

En el segundo tiempo Magallanes intentó posicionarse en campo rival, pero Colo Colo no pasó zozobras, menos después de que el paraguayo Darío Lezcano capturara un rebote dentro del área y anotara el 2-0 definitivo.

Los últimos minutos sirvieron para que la parcialidad alba le dedicara cantos a la U, al que enfrentará el domingo en el Monumental. Los azules tienen 13 puntos y el Cacique 10, pero con un partido menos.

Al término del encuentro Gustavo Quinteros alabó a su defensa tras las dudas de las primeras fechas. A su juicio, mantener el orden de ayer "nos da la posibilidad de ganar y de esperar el Clásico más tranquilo".

El DT admitió que si bien se trata de un partido más, asumió que enfrentar al archirrival para la hinchada resulta especial. "Los clásicos son siempre emocionantes para toda la gente (...) Vamos a hacer todo lo posible para ganar el partido", agregó.

El mejor de la cancha, Marcos Bolados, coincidió: "Siempre es lindo jugar un clásico".

El Betis y el Real Madrid empataron 0-0 en el Benito Villamarín, un resultado que frena a los merengues en su afán por acercarse al líder Barcelona, del que ahora se queda a nueve puntos, tras un duelo eléctrico y en el que el equipo sevillano le plantó cara, con coraje y ambición en su lucha por clasificar a la Champions League, partido en el que el portero chileno Claudio Bravo fue determinante. El vilucano repelió a los 48' una volea de Karim Benzema y más tarde repelió en doble instancia un ataque del uruguayo Federico Valverde, para luego hacer lo propio en un tiro libre servido por Toni Kross, además de intentonas de Vinicius Junior y Nacho.

Con la igualdad el Betis de Manuel Pellegrini quedó quinto con 41 puntos.

El Olympique de Marsella se rehizo tras dos derrotas consecutivos, incluidas una dolorosa eliminación en la Copa de Francia por penales, y logró una trabajada victoria por 1-0 ayer ante el Rennes, en la Ligue 1. En el juego el chileno Alexis Sánchez se mostró activo y fue una constante preocupación para los locales, que tenían dificultades para frenar la movilidad del tocopillano, quien en la semana había calificado la eliminación de la Copa de Francia como la "peor derrota de su carrera". El gol de la victoria lo anotó el bosnio Sead Kolašinac a los 57 minutos. Con su victoria el Olympique sumó 55 puntos y quedó a ocho del líder PSG.