La transformación laboral y su impacto en los trabajadores
Las consecuencias de la incorporación de nuevas tecnologías, sobre la seguridad y salud de los trabajadoras, aún estarían insuficientemente evaluadas.
Redacción / Andre Malebrán - La Estrella de Tocopilla
La transformación laboral ha provocado cambios significativos en los riesgos laborales, tanto en la seguridad como en la salud de los trabajadores. En Chile, se han establecido nuevas normas y regulaciones para proteger a los empleados de los riesgos emergentes, obligando a las empresas a proporcionar un ambiente laboral seguro y saludable y a implementar medidas preventivas.
Según los informes del ISL, en 2020 el costo total de los accidentes y enfermedades laborales ascendió a 311 millones de dólares para las empresas, lo que demuestra la importancia de la prevención también en términos económicos.
La globalización y eventos globales como la pandemia y los procesos migratorios masivos han acelerado el desarrollo de nuevas tecnologías, aumentando el teletrabajo y diversificando las plataformas digitales. En muchos casos, esto se ha traducido en empleos precarios con entornos laborales inseguros y poco saludables. Estas nuevas formas de trabajo han expuesto a los trabajadores a riesgos que antes no existían o no se evidenciaban.
Los profesionales del Departamento de Prevención de Riesgos Laborales del ISL explican que "las consecuencias de la incorporación de nuevas tecnologías sobre la seguridad y salud de los trabajadores aún no han sido suficientemente evaluadas". Para abordar esta situación, los modelos de prevención se centran en la evaluación del riesgo, la sensibilización del personal, la mejora del entorno laboral y el fomento de una cultura de seguridad.
Chile ha logrado importantes avances en materia de seguridad y salud laboral gracias a la implementación de diversas leyes y normativas destinadas a proteger a los trabajadores. Entre estas regulaciones se encuentran el Convenio Nº190, que reconoce el derecho de todas las personas a un mundo laboral libre de violencia y acoso, y el Convenio N°187, que establece la responsabilidad de los empleadores y los trabajadores para lograr un ambiente laboral seguro y saludable.
Los riesgos emergentes incluyen las nuevas tecnologías, procesos de producción, nuevas condiciones laborales y el trabajo remoto, que pueden generar problemas de ergonomía, aislamiento social y estrés laboral. La ciberseguridad, la discriminación y el acoso, el aumento de accidentes viales y los entornos laborales inseguros también son parte de los riesgos que afectan la salud mental y física y deben ser abordados por las empresas.
Aún existen desafíos en materia de seguridad y salud laboral. Los riesgos psicosociales, la carga emocional y el acoso siguen siendo un problema en muchos trabajos. Asimismo, los cambios demográficos y la diversidad requieren enfoques inclusivos, y el trabajo precario o las nuevas formas laborales presentan desafíos en regulación y prevención.