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[tendencias]

Jugar con preescolares mejora la salud mental de mujeres mayores

Un estudio reveló que relacionarse con niños mejora los niveles de depresión y ansiedad en personas de sexo femenino que viven en casas de reposo.
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Natividad Espinoza

Interactuar con niños en edad preescolar eleva el bienestar mental de las mujeres mayores, de acuerdo con un nuevo estudio de la Universidad de Stellenbosch (Sudáfrica), publicado en la revista PLOS ONE.

La investigación, titulada "La experiencia de las interacciones intergeneracionales y su influencia en la salud mental de las personas mayores que viven en residencias", se realizó con mujeres que habitan una casa de reposo en dicho país.

Las coautoras del trabajo, Elizabeth Jane Earl y Debbie Marais, escribieron que "estudios previos sugieren que, aunque la salud física está bastante bien cuidada en los hogares de ancianos, la salud social y mental reciben menos atención, por lo que parece haber una alta prevalencia de problemas psicológicos no diagnosticados ni tratados en los hogares de ancianos".

En este contexto, las profesionales hicieron a las participantes completar un cuestionario que incluía la Escala de Depresión Geriátrica y la Escala de Ansiedad Geriátrica, además de una entrevista semiestructurada. Esto, al principio y el fin del estudio.

Tras un período de interacción constante con preescolares, con actividades como jugar, armar rompecabezas, leer y cantar, las participantes del estudio ganaron un mayor sentido de pertenencia, de propósito, reminiscencia y también experiencias afectivas positivas. Así, el trabajo concluye que las interacciones intergeneracionales pueden servir como terapia complementaria en el manejo de condiciones comunes de salud mental en adultos mayores que viven en residencias.

Depresión y ansiedad

De las 10 participantes del estudio cualitativo, al inicio cuatro se evaluaron como posiblemente con ansiedad, depresión o ambas; al final del trabajo, todas bajaron sus puntajes ligados a esos problemas de bienestar mental.

Además, las interacciones hicieron a todas las adultas mayores sentirse más animadas e incentivaron el diálogo entre ellas y con los niños, reviviendo recuerdos de su propia infancia.

Numerosos estudios anteriores habían avalado los beneficios de las relaciones intergeneracionales.

Conozca los síndromes más comunes entre las trabajadoras

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Múltiples factores hacen más compleja la carrera laboral y profesional de las mujeres. Algunas de estas dificultades parten de factores ajenos a ellas, sin embargo, muchas veces son síndromes internos -potenciados por el entorno- los que complejizan la percepción que tienen sobre sus propios talentos, desempeños y trayectorias.

En los últimos años, por ejemplo, se ha oído mucho del Síndrome del Impostor. Hay estudios que señalan que este fenómeno lo han experimentado el 70% de las mujeres profesionales, quienes creen no merecer éxito ni reconocimiento por su trabajo. Sin embargo, hay más fenómenos que ocurren desde los sesgos de género.

Gracia Dalgalarrando, fundadora y gerenta general de WoomUp, plataforma que ayuda a la equidad de género en empresas, reveló que los principales son tres.

Síndrome de Niña Buena: "Eso no es de señoritas" o "nadie te va a querer con ese carácter", son frases que marcan y que pueden llevar a desarrollar este síndrome, dejando a las mujeres con el temor de decepcionar, herir o incomodar a los demás. Aquí las mujeres suelen anteponer necesidades y deseos de los demás antes que los suyos.

Síndrome de la Cuerda Floja: se refiere a las mujeres que al cumplir con las características que se reconocen como "femeninas" -como ser dulce, amable o no alzar la voz- tienen dificultades para representar un estilo de liderazgo fuerte y decidido. La consecuencia es que ellas viven en una completa incertidumbre, ya que siempre están buscando el balance para ser asertivas, sin generar comentarios o incomodidades en el resto.

Síndrome de la Tiara: son mujeres que toman una actitud pasiva en el trabajo, cumpliendo con sus deberes haciéndose notar lo menos posible, pero con la expectativa de ser reconocidas públicamente por sus superiores, o sea, "coronadas con una tiara".

Cómo vencerlos

Dalgalarrando expresó que la presencia de estos síndromes entre las profesionales es mucho mayor de lo que se cree enChile, por lo que es urgente avanzar dentro de las empresas para que impulsen acciones que generen un cambio.

Ente las sugerencias de la experta está adoptar un entrenamiento para sensibilizar sobre equidad de género, implementar procesos de selección inclusivo, abrir oportunidades de ascenso y otras.

Dalgalarrando además advirtió que "necesitamos hackear nuestro cerebro con psicología positiva: por ejemplo, reemplazar el miedo que nos produce haber avanzado en la empresa por agradecimiento".

"Si trabajo en mi expresión corporal, y trato de respirar más pausado, de cambiar mi expresión de preocupación por sonreír más, esa información mi cuerpo la transmite al cerebro y la interpreta como que me siento bien y más relajada", añadió.

Advierten sobre blanqueadores dentales

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Los lápices "blanqueadores dentales" están de moda hace un tiempo y tienden a ser más usados por ellas. Sin embargo, pueden arriesgar la salud.

Así lo advirtió Felipe Gallardo, académico de Odontología en la Universidad Andrés Bello Concepción, quien dijo que estos blanqueadores en realidad decoloran los dientes y que ciertas marcas no dicen sus componentes.

"El peróxido de hidrógeno es uno de los más usados, en porcentajes variables de hasta un 6%. El mecanismo por el cual este compuesto actúa no se conoce bien, pero se sabe que es un agente oxidante que, al difundir a través de la estructura dental, se disocia para producir radicales libres inestables, capaces de degradar los agentes que provocan tinciones dentales", explicó.

Al someterse a estos tratamientos sin supervisión médica es común que haya efectos secundarios como irritación gingival y sensibilidad dental. Además, dijo el profesional, "el grado de estos efectos irá en directa relación a la concentración del peróxido y la duración del tratamiento y se ha reportado que la sensibilidad dental es el efecto adverso más común en los pacientes que se aclaran los dientes".

Gallardo destacó también que el uso prolongado de estas sustancias sin control, seguridad y protocolo puede ser riesgoso también para los tejidos blandos de la boca.

"Se ha visto que, sobre ciertos niveles, la ingesta de productos con peróxido de hidrógeno puede provocar efectos letales en animales", subrayó.

En pacientes se han descrito úlceras bucales, aumento de la sensibilidad, inflamación gingival, erosión dental y hasta molestias gástricas.