Camila Infanta S.
El Gobierno anunció ayer por la tarde una propuesta para reajustar en forma progresiva el salario mínimo y así llegar a $276 mil, en 18 meses.
El anuncio de un incremento de un 10,5% en un año y medio lo realizó desde el Congreso el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, luego de que durante la mañana comunicara el ingreso al Parlamento del proyecto para aumentar el salario mínimo en un 4% en 12 meses, llegando así a $260.000.
Valdés precisó por la tarde que el nuevo anuncio, que se seguirá discutiendo hoy, se aplicará en tramos: "parte con un aumento de $7.500, a los seis meses $6.500, después $6.000 y después $6.000 más".
Sobre los motivos para hacer una oferta adicional, dijo: "el proyecto que trajimos en la mañana no tenía los votos para ser aprobado", ya que generó el rechazo de la DC, que pedía un ajuste similar al que propuso el Ejecutivo en la tarde.
La ministra del Trabajo, Ximena Rincón, precisó que la vía para incorporar la nueva modificación será una indicación.
La iniciativa deberá ser aprobada por ambas cámaras, antes del 1 de julio, para aplicarse.
El alza inicial de $10.000 era también más baja de lo que pedía la CUT, que solicitaba en un comienzo un aumento de $40 mil en 18 meses, expectativa que luego bajó.
"Con ellos tuvimos buenas conversaciones, pero los $40.000 eran muy por encima de lo posible", dijo Valdés por la mañana, quien aseguró que los beneficiados, a nivel país, serían unas 180.000 personas.
Agregó que "queremos cautelar la empleabilidad de la gente también, y eso requiere un aumento y considerar las condiciones económicas que tenemos".
La ministra Ximena Rincón, aseguró por la mañana que "las empresas ya han tenido que ajustar por la vía de disminución de jornada y ajuste de remuneraciones para no tener que despedir. Si nosotros le ponemos más presión a la economía, provocaríamos un efecto que nadie puede desear".
Desde la CUT, su presidenta Bárbara Figueroa dijo también en la mañana que "esto demuestra que cuando no hay capacidad de asumir los desafíos y las políticas públicas que un Gobierno plantea, quien termina pagando los costos es el mundo de los trabajadores".
Agregó que el cambio es menor a lo logrado en la negociación anterior, a 18 meses.
A nivel académico, la propuesta inicial del Ejecutivo fue buen recibida. El vicedecano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián, Mario Valenzuela, se mostró de acuerdo con el planteamiento de la mañana del gobierno, debido al momento que vive la economía local.
Explicó que el grupo al que está dirigida la medida generalmente son quienes podrían quedar cesantes si el alza fuera más grande. Esto "no se puede olvidar en esta discusión", dice.
Consultado sobre los efectos del alza del salario mínimo, dijo que ayudará a mantener el valor del dinero "en términos de su poder adquisitivo estable a través del tiempo".
El académico agregó que para quienes será más tangible la medida, es decir para 180 mil ciudadanos, es para las personas que "consumen algo cercano a lo que es la canasta básica".
180 mil personas serían las beneficiadas con el alza. El proyecto ahora debe ser aprobado en el Congreso.