1# 2# 2# 4# iván zamorano
Alexis sánchez eduardo vargas
Marcelo salas
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Mauricio Riquelme C. - La Estrella
Cuando apenas era un niño y jugaba en las polvorientas canchas de su amada Tocopilla, Alexis Sánchez siempre dijo que algún día sería el mejor del mundo y que sería campeón del mundo, algo que está cada vez más cerca.
Es que el "Niño Maravilla" a sus 27 años tiene cuerda para rato como profesional, por eso aquellos dichos de pequeño ilusionan a todo un país.
La Copa América Centenario vio a un Alexis motivado, concentrado, dejando todo en cancha, a pesar de haber tenido una larga temporada con el Arsenal y sin haber tenido un merecido descansado como mucho de sus compañeros de profesión e incluso de selección. Sin embargo, eso no fue impedimento para que el tocopillano sea premiado como el "Mejor jugador" de la copa disputada en Estados Unidos, haber llegado a los 101 partidos vistiendo al camiseta de la selección chilena (Claudio Bravo encabeza la lista con 106) y convirtiéndose en la tercer goleador histórico de Chile por detrás de Marcelo Salas e Iván Zamorano, pero con varios años por delante para jugar.
Premios al esfuerzo mostrado por Sánchez, que apenas terminó la final envió un mensaje a través de la redes sociales a su amada Tocopilla y obvio para su querida madre. "Mugriendo (un amigo) saludos, un beso para mi mamá y para quienes están ahí", fue el mensaje enviado por Alexis a sus amigos y familiares que estaban viendo el partido reunidos en Tocopilla.
Así es Alexis, el jugador que deja todo en la cancha por Chile, pero que nunca olvida sus raíces y el amor por la "Roja de Todos".
Cuando el defensor argentino pisó a Alexis, apenas comenzaba el partido, todos pensamos lo peor. Tu tobillo izquierdo recibió el castigo del argentino Gabriel Mercado, pero Sánchez se levantó y siguió jugando. Sin embargo, se notaba que algo no andaba bien, pero nunca bajó los brazos. Con el pasar de las horas publicó en su cuenta de Twitter cómo había quedado ese tobillo con el golpe. Irreconocible, inflamado por la patada, pero a pesar de eso, AS7 demostró ser un duro de matar.