Cartas
Más vigentes
Estimados Sergio Mercado y Víctor Toloza, directores de La Estrella de Antofagasta y de El Mercurio de Antofagasta:
¿Qué se puede decir cuando la razón es pasada a llevar por la violencia sin control?
¿Qué se puede hacer cuando se cumplen a cabalidad con los principios de tener un periodismo abierto a la comunidad, que aboga por el progreso de la población en conjunto y de vuelta son agredidos?
¿Qué se puede llegar a pensar o a imaginar lo que ocurrirá en el tiempo de continuar esta cascada de hechos repudiables, que no solo nos empobrecen en nuestros bienes, que por lo demás pueden ser reemplazados como tantas otras cosas, sino que como personas, como comunidad, como región, como país, como chilenos?
Un saludo muy afectuoso para ustedes don Sergio y don Víctor y por su intermedio a todos sus colaboradores, ante el cobarde atentado que sufrieron en vuestras oficinas de los diarios que dirigen, destrucción, desazón, y porque no decirlo rabia, de ver que mientras hay muchos que quieren construir un Chile que transite por un camino de entendimiento y paz, otros sencillamente optan por lo más fácil, destruir.
Bien lo expresó Miguel de Cervantes, cuando Don Quijote le dice a su fiel escudero: "Sancho, si los perros ladran, es señal que cabalgamos".
Don Sergio y Don Víctor, qué mejor prueba de profesionalismo, de compromiso con la ciudad y sus vecinos, hoy La Estrella de Antofagasta y El Mercurio de Antofagasta, estaban más vigentes que nunca, como si no hubiera pasado nada. Esa es la mejor reacción ante tan deleznable ataque que podían ustedes realizar, para dejar muy claro que La Estrella de Antofagasta y El Mercurio de Antofagasta, al igual que los árboles cuando son arreciados por fuertes vientos, se mecen, se arquean, crujen, pero al poco tiempo vuelven a estar fuertes y más convencidos que nunca, que lo que hoy hacen y seguirán haciendo, es lo mejor que han elegido para hacer con sus vidas personales, familiares y laborales, estar muy cerca de la gente, con un periodismo muy profesional y con la precisión en los contenidos que el actual escenario de Chile lo merece, lo necesita y corresponde...
Un fuerte abrazo,
Luis Enrique Soler Milla