Mauricio Riquelme C. - La Estrella

Stephen Curry (Golden State Warriors) se convirtió en el máximo triplero en la historia de la NBA, superando el récord de Ray Allen (2.973) que estaba presente en las graderías del Madison Square Garden viendo cómo este talento del baloncesto borraba su marca con 511 partidos menos.

Curry llegó a los 2.974 triples en 789 partidos, un camino que hoy es exitoso, pero que estuvo plagado de lesiones y duros momentos antes de ser reconocido en todo el mundo.

Si no fuese por su primera cirugía de tobillo y su proceso de rehabilitación en 2011, Curry probablemente nunca hubiese conocido al compañero de entrenamiento que le ayudó a llegar hasta aquí.

En el verano de 2011, mientras Curry se rehabilitaba en Architech Sports and Physical Therapy en Charlotte, Carolina del Norte, tuvo un encuentro fortuito con Brandon Payne, un entrenador local que trabajaba con otros jugadores de la NBA. Mientras estaba en silla de ruedas, Payne lo instó a trabajar en coordinación óculo-manual y lanzar sentado.

Talento tenía el escolta, pero las lesiones lo seguían perjudicando. El tobillo no le daba respiro. En 2012 dividió su tiempo entre los Warriors y la rehabilitación.

Pero entonces la lesión comenzó a desaparecer y apareció la gran estrella que hoy es Curry. En sus primeros tres años en la liga el jugador promedió 124 triples por campaña. A lo largo de su carrera de 18 años, Allen promedió 165 por temporada.

Allen logró los 2.973 triples en 1.300 partidos disputados. Steph los superó en apenas 789, 511 menos. En promedio, hablamos de 2.3 triples convertidos por juego contra 3.8.

Allen, si bien era un auténtico criminal del aro, logró 2.500 de sus 2.973 triples por asistencias (el 84%). Steph, en cambio, anotó solo 1.840 con pases gol (62%). El resto, 1.137 fueron creando su propio lanzamiento.

No hay récord que se resista. Lleva ocho campañas con al menos 200 tiros y en un año calendario, el 2021, superó los 400.

2.974 es la nueva marca de triples en la NBA que consiguió Stephen Curry en 789 partidos.

43% es la efectividad del escolta de los Golden State Warriors desde la línea de tres puntos.

Las selecciones de Argentina e Italia, campeones de la Copa América y Eurocopa, respectivamente, se enfrentarán el 1 de junio de 2022 en Londres, tras el acuerdo entre Conmebol y la UEFA, dentro del Memorándum de Entendimiento renovado este miércoles hasta el 30 de junio de 2028.

Según informó la UEFA, aunque los términos del acuerdo original firmado en 2020 se mantienen, el documento renovado también contiene disposiciones específicas relacionadas con la apertura de una oficina compartida de la UEFA y la Conmebol en Londres y la posible organización de una serie de eventos futbolísticos.

El primero sería el enfrentamiento entre Italia, campeona de la última Eurocopa tras ganar a Inglaterra por penales y Argentina, campeona de la Copa América 2021, al superar por 1-0 a Brasil, en una "Finalísima" que se celebrará en un estadio de Londres el 1 de junio de 2022.

El presidente de Conmebol, Alejandro Domínguez anunció que "se sumarán otros eventos deportivos de primer nivel, como corresponde a la tradición del fútbol sudamericano y europeo".

La Premier League de Inglaterra ha endurecido el protocolo contra el covid-19 y ha impuesto los test de antígenos diarios a futbolistas y empleados de los clubes además de dos PCR semanales para controlar los brotes.

Esta medida se ha tomado después de que la Premier anunciara 42 casos la semana pasada, lo que supone el mayor número desde que comenzó la pandemia y volvió el fútbol, y un descontrol total en comparación con la anterior mayor cifra de esta campaña: los 16 positivos de mediados de agosto.

El incremento de contagios en el Reino Unido por la variante ómicron, que está batiendo récords desde el verano, se ha trasladado también a la Premier League, que ha visto cómo el Manchester United, Tottenham, Brighton, Leicester City, Norwich City y Aston Villa han anunciado varios positivos en los últimos días.

El piloto inglés Lewis Hamilton, que no pudo ganar el título mundial de la F-1, fue nombrado Caballero de la Corona en el Reino Unido.

El oriundo de Stevenage (Inglaterra) fue nombrado Caballero (Sir) por el Príncipe Carlos en una ceremonia celebrada en el castillo de Windsor. El título que le fue asignado corresponde a los logros que conquistó a través de su carrera deportiva.

El corredor de 36 años, subcampeón del último Mundial de la Fórmula 1, acudió a la histórica fortaleza acompañado de su madre Carmen Larbalestier.

Cabe destacar que Hamilton es el cuarto piloto de la F-1 en ser nombrado Caballero: Jack Brabham (1979), Stirling Moss (2000) y Jackie Stewart (2001) lo antecedieron, pero ninguno sigue con vida.