Nuevo estudio asegura que las fases del ciclo menstrual no influyen en el ejercicio
Examinadas en sus distintas etapas, ellas respondieron sin variaciones, tal como los hombres.
Natividad Espinoza R.
Variar el nivel de exigencia en el entrenamiento femenino según la fase del ciclo menstrual por la que se está pasando, es una modalidad que ha ido ganado adherentes en el último tiempo. Quienes la han adoptado afirman que, por ejemplo, no se le puede exigir lo mismo a una mujer que está menstruando que a una que está en plena ovulación.
Sin embargo, un nuevo estudio de investigadores de la Universidad Brigham Young (EE.UU.), recientemente publicado en el Journal of Applied Physiology (Diario de Fisiología Aplicada), asegura que el rendimiento físico no depende de las fases del ciclo menstrual.
Para la investigación, siete mujeres y 10 hombres completaron tres intensas sesiones de ciclismo, estando ellas en tres fases de su ciclo menstrual (lo que se confirmó mediante extracciones de sangre y pruebas de ovulación), mientras que los hombres fueron testeados cada 10 días.
Al analizar el rendimiento de las mujeres a lo largo de sus ciclos menstruales, los investigadores no encontraron variabilidad dependiendo de las etapas del ciclo mentrual: de un entrenamiento a otro, el rendimiento de las mujeres resultó ser tan consistente como el de los hombres.
"Las mujeres con ciclos regulares tuvieron el mismo desempeño entre la fase alta en estrógeno, la fase alta en progesterona y durante la menstruación, cuando hay bajas concentraciones de ambas", dijo Jessica Linde, quien dirigió el estudio para su tesis de maestría en ciencias del ejercicio.
"Esa información levanta una gran barrera. Muestra que no deberíamos excluir a las mujeres de la investigación basándonos en la idea de que sus ciclos menstruales van a sesgar los resultados", agregó la profesional, destacando que la mayoría de los estudios que se han hecho sobre rendimiento físico cuentan sólo con voluntarios del sexo masculino, ya que se los considera más "estables".
Definiendo diferencias
Además de descubrir que el rendimiento femenino no varía según el ciclo mentrual, la investigación demostró por qué es crucial incluir mujeres en este tipo de trabajos. Si bien los ciclos menstruales no afectaron su ejercicio, hubo diferencias clave entre cómo se desarrolló la resistencia de ellas y de ellos. Por ejemplo, las mujeres alcanzaron el agotamiento por fatiga muscular alrededor de un 18% más rápido que los hombres, incluso cuando se ajustaron a la masa muscular, posiblemente porque los cuerpos femeninos pueden reservar naturalmente más energía.
"La suposición en la investigación del ejercicio ha sido durante mucho tiempo que las mujeres son como los hombres, solo que más pequeñas", dijo el profesor de ciencias del ejercicio y coautor de la investigación, Jayson Gifford.
"Nuestro estudio sugiere que no lo son, que existen diferencias importantes entre el ejercicio de mujeres y hombres. Incluir a más mujeres en la investigación nos permitirá afinar los enfoques de la fisiología femenina", manifestó el estudioso.
Aunque las participantes femeninas a menudo les dijeron a los investigadores que sus ciclos menstruales afectaban cómo se sentían y qué tan bien esperaban desempeñarse, sus resultados medibles no mostraron "absolutamente ningún cambio", dijeron los investigadores. Si bien se sabe que las hormonas como el estrógeno influyen en la dilatación de las arterias y en la forma en que la sangre fluye hacia los músculos, esos procesos subyacentes "no significaron un deterioro del rendimiento general".
Linde y Gifford destacaron que el estudio se centró sólo en el ciclismo e incluyó exclusivamente a mujeres sin trastornos menstruales. Se necesita más investigación para determinar cómo la menstruación irregular podría afectar el ejercicio.