Natividad Espinoza R.

Considerando que el viejo continente está en "alto riesgo"de sufrir una nueva oleada de contagios de covid-19, la Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS)publicó ayer una serie de medidas para celebrar la Navidad de forma segura.

Las recomendaciones se basan en posponer o reducir las celebraciones religiosas y ferias navideñas en los países que tienen una transmisión comunitaria generalizada, mientras que a las naciones con menores tasas de contagios se les sugirió celebrar al aire libre, garantizando el distanciamiento físico, la higiene de manos y el uso de las mascarillas.

En tanto, a los que van a celebrar en interiores la OMS aconsejó "limitar el tamaño del grupo y garantizar una buena ventilación para reducir el riesgo de exposición". Y por supuesto, para quienes piensan viajar la sugerencia es que eviten el uso de medios de transporte que vayan repletos de personas.

Para mayor resguardo

A diferencia de Europa, el hemisferio sur está entrando al verano, por lo que la idea de celebrar en exteriores es más fácil de aplicar aquí. Tomando en cuenta esto, el médico urgenciólogo de Clínica Alemana, Pedro Verdugo, dijo a este medio que el llamado es a optar por este tipo de celebraciones y que si las personas van a juntarse en sus casas con familiares o amigos que viven en otros lugares, una buena idea es que, además, estos últimos lleven sus propios utensilios de cocina (cubiertos, platos, vasos, servilletas, etc.) a la sede de la celebración.

No obstante, el experto dijo que sería incluso mejor que las celebraciones presenciales se hicieran sólo entre personas que habitan un mismo hogar, con la opción de sumar a otros seres queridos -de la misma y otras ciudades- mediante el uso de la tecnología.

"De repente se puede usar Zoom y conectarlo de un computador a un televisor para que se vea más grande y sentirnos más en familia", sostuvo el profesional.

"Sabemos que es muy difícil recibir un regalo en una noche que está llena de cariño sin abrazar alguien para darle las gracias. Creo que es más fácil no juntarse y aplazar la celebración que estar con la familia con mascarillas y distanciados", añadió.

Destacando el aporte que ha significado para su comunidad en las consecuencias que trajo el covid-19 y la ausencia de clases presenciales, fue galardonada la profesora Cicilia Gatica (52 años), como el primer lugar de la iniciativa social "Nuevos Héroes 2020". La docente de la Escuela Sara Cruz Alvayay de Junta Valeriano, de la provincia del Huasco, toma un caballo prestado semana por medio y viaja hasta ochos horas para dar clases puerta a puerta a sus alumnos que viven en la cordillera, donde muchos de ellos no tienen conectividad y tampoco computadores. "Una de las cosas que a mí siempre me ha preocupado es la estabilidad emocional y todo lo que está relacionado con las familias", destacó.

El huevo como relleno

Ya hemos hablado en este espacio sobre la gran versatilidad que tiene el huevo en la cocina. Duro, frito, escalfado o revuelto. Utilizado en tortillas o para hacer una mayonesa. Como insumo principal de merengues y cremas dulces o también en batidos para el pescado frito o para bañar unas futuras escalopas antes de pasarlas por el pan rallado. En fin, por todas esas razones y más, siempre pero siempre hay que tener huevos en la cocina. Sin embargo, una faceta algo olvidada de los huevos es su uso como relleno salado. Es decir, como materia prima para pastas de variados tipos y usos.

Tal vez la más clásica de todas es la que se hacía con huevo duro molido y mayonesa para luego armar maceteados sandwichs en pan de molde o marraqueta, casi como una variante de los tradicionales ave pimiento y ave palta. Lamentablemente, ya no vemos esta delicia en ninguna parte. También estaba la variante de juntar la pasta más atún en lata, creando una bien sabrosa que solía usarse para rellenar fondos de alcachofa o rollitos de jamón en ohenteras entradas ya olvidadas. Cualquiera de estas pastas y otras en base a huevo también se podían usar encima de canapés, sobre todo en las fiestas de fin de año como graduaciones y Año Nuevo. Ahora bien, la mejor expresión del huevo como relleno se daba justamente en los huevos rellenos. ¿Cómo era eso? Se usaba la clara del huevo cocido como recipiente de una pasta que se elaboraba mezclando la yema (también cocida) molida más mayonesa y de ahí en más prácticamente lo que uno quisiera: palta, anchoas, aceitunas, perejil y salmón, etc. Hasta mediados de los ochenta eran número puesto en la mesa de cualquier celebración. Y para recordar esto hoy presentamos una receta -de entrada- en que justamente el relleno es en base a huevo. Ideal para comer con altas temperaturas.

Ingredientes

(Para cuatro personas)

-2 paltas grandes

-2 huevos duros

-200 gr de camarones cocidos y pelados

-1 taza de mayonesa

-¼ taza de perejil recién picado

-1 taza de porotos verdes picados y cocidos

-1 limón

-aceite de oliva

-sal y pimienta

Pelar bien los huevos y ponerlos en un bowl. Con la ayuda de un tenedor molerlos. Luego, agregar una pizca de sal y pimienta más los camarones, el perejil, la mayonesa, un chorrito de aceite de oliva y unas gotas de jugo de limón. Revolver todo muy bien hasta conseguir una pasta homogénea y reservar.

A continuación, partir las paltas a la mitad y sacarles los cuescos con la ayuda de un cuchillo. Después, con una cuchara, sacar la carne de cada mitad de palta teniendo cuidado que éstas no se rompan. Con un cuchillo, hacer un pequeño corte horizontal a cada mitad por su lado curvo, para así apoyar bien la palta en un plato. Finalmente, rellenar cada mitad con una abundante cantidad de pasta de huevo y camarones. Por último, poner dos mitades de palta en cada plato sobre una base de porotos verdes.

Aliñar todo con un poco de sal, pimienta, aceite de oliva y apenas unas gotas de limón.

Palta rellena con pasta de huevo y camarones

por Álvaro Peralta / @dontinto